Todos aquellos que asocian la escena musical de Barcelona con el mestizaje, el tecno-pop, los sesudos sonidos del post rock-experimental o la canción de autor, se sorprenderán de la existencia de una banda como Ovni, un grupo con una actitud rockista impecable y bien cimentada y con las ideas muy, muy claras sobre lo que debe ser su propuesta artística.
Ovni acaban de editar Aterrizaje! (Rock On) su segundo LP, un disco fresco y brillante (en el sentido más luminoso de la palabra), producido por el ex Enemigo Fino Oyonarte. La banda está integrada por tres músicos argentinos: Maxi Segovia, cantante y guitarra; su hermano Mati (batería) y Esteban García (guitarra). Completa la formación el catalán Pere “cohete” Fernández .
Maxi explica que él y su hermano llegaron a Barcelona en el año 2000 después de haber perdido su empleo en una agencia de comunicación en Buenos Aires. Tras pasar por Nueva York y París, decidieron establecerse en la ciudad condal “porque enseguida vimos que había movida y buen rollo”. Mati enseguida se enroló como batería de Carrots y Maxi se ocupó del “backline” de la banda de El Prat de Llobregat, lo que les permitió conectar con más músicos locales, entre los que estaba el ex Matamala y ex Fromheadtotoe Pere “cohete” Fernández. En 2003 publican su primer EP, Rompiendo todo, que les permite darse a conocer y cosechar muy buenas críticas entre los medios locales.
Enseguida surgieron las comparaciones con otros músicos argentinos radicados en España pero Maxi Segovia ataja cualquier relación con Tequila, Los Rodríguez o las trayectorias en solitario de Ariel Rot o Andrés Calamaro. “Por una parte, a nosotros nos interesa mucho el rollo ochenteno de las bandas de la new wave o el punk de Ramones o los Buzzcocks y también grupos actuales como The Strokes”. Por lo que se refiere al rock argentino el cantante de Ovni asegura ser “muy fan” de los grupos beat de los sesenta como Los Gatos Salvajes, de Litto Nebbia o de los brasileños Os Mutantes porque han “generado muchos recursos a la hora de componer”.
Recursos que ya aplicaron en 1984, su primer disco largo que Segovia califica de más oscuro que Aterrizaje! “La diferencia fundamental es que 1984 se grabó tocando todos a la vez en una masía de Torelló con una cinta abierta y una mesa de 16 canales. El resultado final fue un sonido crudo. Tenía que ser así”.
Aterrizaje!, en cambio, y en palabras del propio Maxi Segovia, “es algo así como nuestro Sunshine (segundo disco de Carrots, en el que la banda destapó todo su potencial compositivo) gracias a la aportación de Fino Onoyarte, que nos metió mucha caña y a mi me obligó a cantar mejor”. El disco se grabó en los estudios Geek Records, de Boadilla del Monte utilizando muchos instrumentos y material “vintage”. Entre los temas más destacados del CD están “Tu necesidad”, que marca el cambio entre los dos LPs; “Flores secas”, una canción de tintes psicodélicos con un explosivo estribillo que al final explota; “Soy un robot”, “Tal vez”, o la misma “Aterrizaje!”. Los Ovni están muy contentos con el resultado del disco y aseguran que “lo mejor está por venir”. De momento, ya tienen contratadas conciertos, el primero de los cuales será el 19 de abril en la sala Wurlitzer Ballroom (Madrid) al que le seguirá el del día 21 en la sala Apolo (Barcelona).
