DISCOS
«Un conjunto de canciones completísimo, más compacto aún que en el anterior»
Dolorosa
Un gran presentimiento
DISCOS MARCAPASOS, 2018
Texto: EDUARDO IZQUIERDO.
Sobre el elepé con el que debutaron Dolorosa, Que el mañana sea bueno (2017), escribí en su día lo siguiente: «Si algo destaca en la banda granadina encabezada por Raúl Bernal y Natalia Muñoz, no es que el resto de músicos sean una perfecta y engrasada máquina sonora, que lo son, ni que las canciones, íntegramente escritas por Bernal sean magníficas, que también lo son, sino lo bien que les sientan a las voces de los dos protagonistas la intervención del otro». Algo en lo que se reincide en este nuevo trabajo llamado Un gran presentimiento, quizá forzado por dos motivos. El primero de ellos es que Raúl, permanente buscador y perfeccionista empedernido, ha conseguido reunir aquí un conjunto de canciones completísimo, más compacto aún que en el anterior. El segundo es la evolución de Natalia como vocalista, evidente conforme las canciones van pasando por su repertorio.
Pero si algo confirma este segundo trabajo de la banda granadina, tercero si contamos el epé Lo que queda del mundo, es que Dolorosa dejan definitivamente al margen las comparaciones con Amaral o La Buena Vida para escribir definitivamente su propio camino. Haciendo brillar los teclados que Raúl ejecuta con precisión, ampliando sus horizontes sonoros a Latinoamérica, pero también al resto del continente europeo, sin dejar el poso rock. Colocan, como antes era religión, su primer single en la segunda posición de la lista de canciones. “Pasar la tarde” es básicamente pop indie, sin dos de las características habituales del género: cantar mal y que no te entiendan lo que dices. Aunque es en canciones como la inicial “Yo no tengo nada” donde se muestran especialmente inspirados y confirman todo lo que apuntábamos al principio. Buen trabajo. Una vez más.
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Anterior crítica de discos: “Arkestra”, de Los Mambo Jambo.
