La discográfica Nuevos Medios atesora algunas de las joyas esenciales del pop español de los años 80. Tres de ellas, las acaba de poner en la calle en cuidadas ediciones remasterizadas y editadas en digipack:
A santa compaña, de 1984, es el primer LP de Golpes Bajos –tras el inicial y espectacular mini-LP que incluía «No mires a los ojos de la gente» y «Malas tiempos para la lírica»–, un formidable álbum que traía canciones como «Hansel y gretel», «Colecciono moscas», «Cena recalentada», «Come prima» o «La fiesta de los maniquíes». Golpes Bajos estaba manteniendo una trayectoria impoluta, pero entonces no podíamos imaginar lo breve que resultaría su carrera.
Blues de la frontera (1987), de Pata Negra, es, sencillamente, una obra canónica del pop español. Uno de esos discos que es obligatorio tener si quieres hacerte una idea cabal de lo que ha sido la historia de la música popular en nuestro país. Un trabajo enorme e inagotable de principio a fin. Por encima de Nuevo Flamenco –que se gestó, precisamente, desde Nuevos Medios y gracias al visionario Mario Pacheco– y de cualquier etiqueta, los hermanos Amador estaban en estado de gracia y facturando música viva, original y única.
Y hablando de Nuevo Flamenco, la joya de la corona del género es, sin ninguna duda, Quien no corre, vuela (1991), el único álbum que grabó el ex Ketama Ray Heredia. Una obra que une con una sensibilidad inigualable, el pop con los dejes flamencos, la música italiana con nerviosas guitarras eléctricas. «Alegría de vivir» es la canción bandera de un disco que produjo con mano maestra Teo Cardalda (componente de Golpes Bajos y por entonces de Cómplices). Lástima que Ray Heredia muriera tras su edición.