DISCOS
«Afianzando la composición y con un sonido más completo, consigue su objetivo de seguir perfeccionando gradualmente su oficio»
Katy J Pearson
Sound of the morning
HEAVENLY/PIAS, 2022
Texto: XAVIER VALIÑO.
«El psicólogo es caro, así que tienes que saber elegir tus batallas», asegura la inglesa Katy J Pearson al presentar su segundo álbum. «Quiero que la gente sienta cosas con mi música, pero tampoco quiero provocar un trauma a mis oyentes». Parece que la cantante de Bristol ha decidido profundizar en los temas de sus canciones, después de que Return, su debut en 2020, fuese destacado como un «grito de pura alegría» en medio de lo más crudo de la pandemia y el confinamiento.
Pearson, a quien han definido como una deslumbrante mezcla entre Kate Bush y Dolly Parton, es de esas cantantes que buscan una carrera longeva y no el éxito instantáneo. Aun así, su primer disco contenía perlas inmediatas como “Take back to the radio” o “Miracle”, y aquí ese papel bien podría otorgársele a “Talk over town”, “Float”, “Confession” o “Game of cards”. Pero hay más, en este caso con mayor profusión de sonidos electrónicos y una sección de metales, aunque también lamentos acústicos por los familiares ausentes en “The hour”, percusiones desbocadas en “Storm to pass” (gentileza de Morgan Simpson, de Black Midi) o su versión krautrock de “Willow’s song”, de la película El hombre de mimbre (Robin Hardy, 1973). Afianzando la composición y con un sonido más completo, consigue su objetivo de seguir perfeccionando gradualmente su oficio.
–
Anterior crítica de discos: Gipsy power (la banda sonora del cine quinqui), de VV.AA.
