De un tiempo a esta parte, Jaume Sisa ha ido adquiriendo los derechos de su propia discografía, reeditándola en cuidadas ediciones que, por fin, hacen justicia en formato CD a unos discos que conforman una de las obras más singulares, libres e inspiradas que ha dado el pop español y, en particular, la canción de autor. Sus seguidores sabemos que no hay disco malo de Sisa.
Siguiendo con esta labor de actualización, acaban de publicarse dos de sus discos más malditos: Transcantautor última noticia y Barcelona postal. El primero de ellos es en realidad el último que grabó, cuando en 1984 Sisa decidió inmolarse y desaparecer del mapa; para reaparecer poco después en Madrid convertido en Ricardo Solfa y cantando en castellano. Se trata de un álbum doble en el que su autor dejaba claro el buen estado de forma en que se encontraba, pese al cansancio que le llevó camino del exilio interior y geográfico.
El segundo CD, Barcelona postal, es un proyecto de 1982 que pasó bastante desapercibido y que durante años ha sido la pieza más buscada por sus seguidores. Se trata de un trabajo ideado junto al artista plástico Antoni Miralda en el que éste ofrecía (en origen, en el formato de vinilo, en forma de postales gigantes) su visión gráfica de la ciudad de Barcelona, mientras que Sisa recuperaba canciones de todo tipo y procedencia que tuvieran la ciudad condal como protagonista. Un disco que, de algún modo, anticipaba lo que sería la obra melódica de Solfa. En su lujosa reedición actual, se recuperan los diseños originales, se incluyen algunas piezas gráficas inéditas y tanto Sisa como Miralda han firmado cada uno de los discos que conforman esta edición limitada de sólo 1.000 copias que es en sí misma una obra de arte.
Ambos trabajos, absolutamente recomendables, están editados por K Industria.
JUAN PUCHADES.