El proyecto, producido en 1989 por Alain Milhaud e inédito hasta hoy, se convirtió en la primera grabación digital en 48 pistas registrada en España.
Autor: CÉSAR CAMPOY
En la extensa entrevista publicada por «Cuadernos Efe Eme» en su número 4, Alain Milhaud, uno de los productores más importantes y visionarios que ha dado la música española (Los Bravos, Los Canarios, Pop Tops, Smash, Maria del Mar Bonet…), afirmaba que en sus cajones tan solo quedaban dos proyectos por recuperar. Pocos meses después de estas declaraciones, uno de ellos ve finalmente la luz. Se trata del disco «Flamenco Challenge», grabado en los estudios Sintonía de Madrid, en 1989, por Iberia, el combo integrado por cinco artistas, hoy en día, de sobra conocidos: Ginesa Ortega (cante), Salvador Niebla (batería y percusión), Sergi Riera (bajo), Joan Albert Amargós (teclados) y Juan Manuel Cañizares (guitarra).
Registrado en aquel entonces bajo la batuta de Milhaud, aquel dignísimo intento de dar un paso más a la hora de seguir fusionando flamenco, rock y jazz se convirtió en la primera grabación digital en 48 pistas que tuvo lugar en Madrid y, según sus responsables, posiblemente en España, en ese intento continuo de Alain por convertirse en pionero de nuestra música en mil y un aspectos.
Pese a haber reconocido públicamente que el flamenco no figuraba entre sus estilos musicales de cabecera, el afamado productor se encargó de cincelar aquel exitoso «El Garrotín» de Smash, iniciada la década de los 70 del siglo pasado. Varios lustros después, optó por reunir a cinco, por entonces, jóvenes intérpretes con (mucho) futuro (así se ha demostrado), para crear un documento sonoro que estaba llamado a poner su granito de arena en la progresión de un universo musical en el que los puristas acechan sin remisión.
Este disco, que incluye un total de once temas, compuestos por los integrantes del proyecto, se convierte en el único documento oficial de Iberia, una aventura surgida a partir de la unión del gran Amargós con uno de nuestros baterías más totales, Salvador Niebla. Tras lograr que Ginesa y Sergi subieran al tren, finalmente consiguieron que hiciera lo propio un (a la postre) gigante de la guitarra española, Juan Manuel Cañizares. Todos ellos, capitaneados por el visionario Milhaud, trataron de plasmar su buen hacer en el estudio, durante julio y diciembre de aquel 1989. El resultado es un interesantísimo tratado de fusión, que respeta la raíz y los diferentes palos del flamenco, interpretado a partir de una elegancia y virtuosismos evidentes, y que fue producido por Milhaud, y mezclado en compañía de los propios Niebla y Riera.
Este «Flamenco Challenge», editado por Bocaccio Ediciones Musicales, se presententó en sociedad este 12 de noviembre en la sede de la SGAE en Barcelona. El disco incluye un libreto de 32 páginas con abundante material gráfico, así como una presentación a cargo del crítico José Manuel Gamboa.
