A&R
“Aquí hemos empezado hace poco a hacer campamentos de composición. Si están bien hechos los resultados pueden ser increíbles”
Son parte esencial del negocio musical, pero suelen estar alejados del foco. Javier de Torres se aventura en la tarea de presentarnos a los principales A&R nacionales, los hombres responsables de los artistas y sus repertorios. Esta semana conocemos a Santiago Menéndez-Pidal, que ha trabajado en la gran mayoría de multinacionales (BMG, Sony, EMI…) y que ahora es director de Warner Chappell. Un hombre que ha trabajado con Manolo García, Leiva, Vetusta Morla o Dani Martín, entre otros.
Una sección de JAVIER DE TORRES.
Santiago Menéndez-Pidal es actualmente director de la editorial del grupo Warner (Warner Chappell) en España. Trotamundos de la industria musical, tuvo a su cargo la editorial de EMI Music en Australia entre los años 2010 y 2012, y ya de vuelta a España y durante cinco años, recaló en la discográfica Sony Music. Allí se ha relacionado con artistas como La Oreja de Van Gogh, Leiva, Rubén Pozo, Sidonie, Manolo García, Vetusta Morla, Dani Martín o David Otero, entre otros muchos.
¿A qué artistas debutantes has ofrecido su primer contrato y qué te llamó la atención de ellos?
Lo primero es decir que un artista no ficha por una persona. Ficha por una compañía. Que uno sea el principal interlocutor no quiere decir que seas el único, ni el motivo por el que firman. Lo que vende un A&R son los servicios de una compañía, y si quieres que la cosa funcione, asegúrate de que el equipo esté contigo y de saber con qué recursos puedes contar. Que recuerde, si no me falla la memoria, le ofrecimos su primer contrato a Carlos Jean, Wally López, José Padilla, Andy & Lucas, Alejandro Amenábar, Maldita Nerea, Los Cucas, Pastora, Undrop, Los Vengadores, Haze, Deluxe, Cycle, Femme Fatale, Tarik, La Sonrisa de Julia, Los Galván, Dabruk, Las Chuches, Maria Isabel, Russian Red, Zahara, Depedro, Montoto, Ojos de Brujo, Adrede, El Guincho, Yadam González, Canteca de Macao, Carlos Sadness, Alex Ferreira, Goldfields, Paper Kites, Joel Little (coautor de Lorde), Rozalén, Ángel Stanich, Dvicio, Carlos Ares, Soleá Morente, Ana Mena, C. Tangana, PXXR GVNG, Adexe & Nau, Nikone, El Niño de Elche, Rosalía, Beret, BNMP, Juancho Marqués, Colectivo Panamera… Cada uno de ellos me pareció que aportaba algo nuevo y que tenía potencial.
En los casos que citas, ¿necesitaste verlos actuar en directo o te bastó con escuchar sus maquetas?
Siempre los vi en directo o al menos les pedí que tocaran algo. Hay alguna excepción, pero son las que confirman la regla.
Al margen de los debutantes, ¿a qué otros artistas has fichado?
He participado en el fichaje o renovación de Antonio Vega, Dover, Amaral, La Buena Vida, Lucio Godoy, Manuel Balboa, Nacho Mastretta, Mucho Muchacho, La Mala Rodríguez, Nawjajean, Los Planetas, Nacho Sotomayor, Los Piratas, Guillermo, Vicente Amigo, O’funkillo, Las Niñas, Lori Meyers, Iguana Tango, Sunday Drivers, We Are Standard, El Arrebato, Estopa, Roque Baños, Merche, Fon Román, Melendi, Carlos Baute, Bebe, Los Monjes Budistas, Standstill, Elefantes, OBK, Dorian, El Columpio Asesino, Pez Mago, Jimmy Barnes, Ladyhawke, Timomatic, Amaia Montero, Danny Romero, Critika y Saik, Leiva, La Oreja De Van Gogh, Niña Pastori, Luis Eduardo Aute, Yall, Malú, Manolo García, Andrés Suarez, Macaco, Rubén Pozo, Supersubmarina, Sidonie, David Otero, ToteKing, Funambulista, Abraham Mateo, India Martínez, Dani Martín, Vanesa Martín, Demarco Flamenco, Izal, Pancho Varona, Vetusta Morla, Marwan, Álex Ubago, Moncho Chavea, Coque Malla, María Rodés…
¿Escuchas todo el material que recibes o solo aquel que viene recomendado por algún productor o artista de tu confianza?
La verdad: si viene recomendado por alguien que pienso que tiene criterio, le presto más atención.
¿Prefieres preparar audiciones con el artista o escuchar las canciones en soledad?
Si es un artista con el que trabajo prefiero estar con él. Este tipo de escuchas es lo mejor de la profesión. Es un momento en el que te sientes realmente privilegiado, aunque hay que saber hablar con el artista si piensas que hay algo que no vaya a ayudarle en su carrera. Si no es posible estar con el artista, me encanta darle mi impresión lo antes posible para transmitir que sentí en una primera escucha. Si se trata de alguien que no conozco prefiere darle algo más de tiempo para oírlo mejor, y suelo pedir más opiniones.
“No me gusta calificar una obra de arte como un formato. Creo que ese tipo de afirmaciones juega en nuestra contra”
¿Tienes influencia en el repertorio y la línea a seguir por los artistas?
Doy mi opinión, pero sobre todo respeto la del artista. Es su obra y él que tiene que salir a defenderla. Yo intento ayudar y sé que más de uno ha seguido algún consejo. Pero esto es algo para lo que no hay algoritmo posible y nadie tiene la varita mágica.
Cuando el artista no escribe sus propias canciones, ¿cómo actúas para seleccionar un repertorio: acudes a las editoriales, te diriges a compositores que puedan escribir canciones idóneas para el intérprete…?
Las dos cosas. También he ayudado a muchos artistas a desarrollar sus aptitudes como autor cuando he visto que tenían potencial. La mejor manera es ponerles a trabajar con buenos autores o invitarlos a songwriting camps (campamentos de composición). Son fórmulas que pueden hacer milagros, y en el fondo es la labor más bonita que puede hacer un A&R.
¿Supervisas de cerca el proceso de grabación o lo dejas en manos del productor artístico encargado?
Depende del caso. En general con los artistas de pop, los noveles y los que necesitan repertorio estás muy encima. Con artistas más veteranos o de corte rock, indies o cantautores, lo más difícil y laborioso es buscar el productor. Luego dejas hacer.
¿Qué opinas de los campamentos de composición, tan en boga últimamente?
La coautoría es algo intrínseco a la música sajona. La mayoría las grandes canciones del siglo XX tienen más de un autor: ‘Moon river’, ‘Summerime’, ‘She loves you’, ‘Satisfaction’, ‘I say a little prayer’, ‘Good vibrations’… Aquí se ha practicado menos. Los campamentos hace años que se organizan en los paises sajones y aquí hemos empezado hace poco. Si están bien hechos los resultados pueden ser increíbles. Buscar un especialista en melodías, otro en letra y otro en programación para que luego la cosa cuadre y de ahí salga un hit es un arte en sí mismo. Solo hay que escuchar una vez ‘Despacito’ para darse cuenta que detrás de ello hay grandes profesionales de melodía y letra.
Últimamente, muchas canciones de éxito tienen una nómina extensa de autores. ¿Crees que ha perdido fuerza la figura del autor que escribe en solitario una melodía y una letra?
Creo la combinación de varios autores puede mejorar una canción. Por ejemplo, Sabina llevan décadas coescribiendo ocasionalmente y para mí es el mejor autor latino. De ejemplos recientes, te diría que la mejor decisión que tomó Rosalía es trabajar con El Guincho, lo mismo C. Tangana con Alizzz… El tema de los campamentos está más orientado por lo general hacia el pop y el urbano, aunque me encantaría sentar a gente como Iván Ferreiro, Dani Martín, Mikel Izal y Zahara y ver qué sale. Pero siempre habrá gente que preferirá escribir en soledad y que lo seguirá haciendo de forma excepcional. De hecho, los mayores éxitos de artistas locales suelen tener un único autor, véase Pablo Alborán, Vanesa Martín, Dani Martín, Leiva, Vetusta Morla, Mikel Izal, Manuel Carrasco, Melendi…
¿Quién elige habitualmente los singles?
A&R propone, marketing dispone… ¡y el artista le da la vuelta a todo si así lo cree oportuno! Bromas aparte, lo mejor es que haya consejos, y si no lo hay, que el artista decida y se le apoye.
¿Puedes contarnos algún acierto o error importante en la elección de los singles que haya incidido en la carrera de los artistas con los que has trabajado?
Me alegro mucho de haber pujado por ‘Cero’ de Dani Martín como primer single y que luego fuera la canción del año. Lo mismo con con ‘Desde que estamos juntos’ de Melendi o ‘La puerta violeta’ de Rozalén. No lo tenía tan claro con ‘Terriblemente cruel’ de Leiva, pensaba que había mejores singles en el disco. Me alegro de haber cerrado la boca (sonríe).
¿Consideras importante que el artista grabe un álbum completo, o crees que el long play es un formato definitivamente en crisis?
No me gusta calificar una obra de arte como un formato. Creo que ese tipo de afirmaciones como llamar “contenido” a la música y “marcas” a los artistas juega en nuestra contra. Si el material se justifica y la obra tiene coherencia merecerá la pena sacar un álbum, sobre todo para construir una carrera. Si el objetivo es tener radio y estar en el top 50 de Spotify lo mejor, sin lugar a dudas, es ir a por el single del año.
¿Algún artista que te haya dolido perder porque firmó por la competencia? O porque se fue a la autoedición.
Pienso que no he dejado de trabajar con ningún artista al que realmente deseara renovar. Solo me duele un caso, no por el hecho de que se fuera, sino por faltar a su palabra. Para mi quedar en un café y darse la mano es algo importante. De los dos que decidieron ser independientes, nos despedimos como amigos, entendí y respeté sus motivos. Aunque pensé, y a uno de ellos se lo dije, que volverían a una compañía. Y así ha sido en los dos casos.
De todos los discos en los que has intervenido, ¿cuáles son los que te gustaría recordar?
No puedo contestar. Hay muchos artistas a los que quiero y ellos saben lo mucho que me ha marcado trabajar con cada uno de ellos y seria una indiscreción elegir. Pero sí tengo una espina clavada con un disco que todavía no ha visto la luz. En julio del 2016, los Supersubmarina me pusieron ocho temas nuevos. Cerramos productor y fechas para grabar y a los pocos días fue el accidente. Hay varias canciones enormes y espero que vean la luz pronto.
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Anterior entrega de A&R: Portu: “Esta industria sigue siendo apasionante porque la incertidumbre siempre sigue ahí”.