DISCOS
«Un puñado de instrumentales sustancial, para entender el intrincado puzle de intereses que se agolpan en su obra y para volver a certificar que no hay estilo en el que no sobresalga»
Sufjan Stevens
Reflections
ASTHMATIC KITTY RECORDS, 2023
Texto: CARLOS PÉREZ DE ZIRIZA.
Lo de Sufjan Stevens es inabarcable. Y este disco forma parte de la miríada de espléndidos, aunque no indispensables, trabajos que ha ido editando en paralelo a su discografía —digamos— convencional. Si es que algo en él puede llamarse “convencional”. Bandas sonoras, villancicos, mixtapes, colaboraciones… ¿discos menores? No exactamente, aunque ya decimos que no tan esenciales.
Este desvela la faceta más minimalista de su música, sentado ante el piano junto a Timo Andres y Conor Hanick, dando forma al trabajo que gestó con el coreógrafo Justin Peck para el ballet de Houston en 2019, escrito para dos pianos y once bailarines. No fue el piano el primer instrumento que aprendió a tocar: fue el oboe. Pero el instrumento de las ochenta y ocho teclas le sirvió durante mucho tiempo como oxigenante entre ensayos dándole al viento. Él mismo dice que en estas siete composiciones pueden citarse Debussy, Philip Glass o Bruce Hornsby, y lo cierto es que todas ellas proyectan sensibilidad e imaginación desde la austeridad. Un puñado de instrumentales, quizá, solo encomendado a los irreductibles del género, pero sustancial para entender el intrincado puzle de intereses que se agolpan en su obra y para volver a certificar que no hay estilo en el que no sobresalga.
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Anterior crítica de discos: The Stiff Records B-sides (1984-1987), de The Pogues.
