LIBROS
«Una historia tan bien contada que florece casi como novela»
Àlex Oró
Quadrophenia. The Who y la epifanía mod de Pete Townshend
EFE EME, 2024
Texto: CÉSAR PRIETO.
Cuando algún periodista se decide a escribir un libro sobre música, lo normal es que abarque grupos y discos de cierto renombre y éxito; con ello, entre otras cosas, se asegura un público potencial tan amplio como el renombre de sus biografiados. Àlex Oró no, Àlex Oró es valiente y se ha decidido por una obra que, como señala en el prólogo, fue un cierto fracaso. Bien es cierto que cualquier aficionado medio a la música sabe qué es Quadrophenia, igual que sabe qué es Tommy, la otra ópera rock que estaba en la balanza cuando se vio en la tesitura de escoger, pero el primero resultó ser un disco con perspectivas sublimes que no tuvo el recorrido merecido.
A partir de aquí, Quadrophenia. The Who y la epifanía mod de Pete Townshend, recién editado por Efe Eme, contextualiza desde tres fuentes: un repaso al movimiento mod —el autor habla con conocimiento de causa, ya que escogió esta escena como hogar musical—, a lo que son las óperas rock desde su inicio y a la historia anterior del grupo hasta los años setenta en los que se encuentra ya destrozado. Pete Townshend tiene ideas de bombero, el grupo un descontento total, John Entwistle con problemas personales… En la gira de presentación del disco los problemas se resolverán a puñetazos.
La segunda parte se dedica en exclusiva al disco, comenzando por su génesis y por el análisis detallado de todas sus canciones, para pasar a la parte que requiere una documentación bien asentada, que el autor maneja con soltura y adecuación. La grabación, por ejemplo, en la que quisieron inaugurar el sonido cuadrafónico, cuando ningún estudio tenía tecnología para llevarlo a cabo. Pasa después por la portada y el libreto y la repercusión en prensa y público, que recibió el disco con ventas aceptables, pero que poco a poco lo fue apagando en consideración. Un aparte habla sobre sus problemas con la censura en nuestro país, con la eliminación de canciones o el dibujo de prendas de ropa sobre las fotografías de chicas desnudas que Jimmy tiene en su habitación.
Tras el disco, el libro se ocupa de la evolución posterior del grupo —con curioso contacto con la escena punk incluido— y las muertes de Entwistle y el batería Keith Moon, hasta llegar a la actualidad con un grupo que ha seguido subiendo a los escenarios y haciendo algunas buenas canciones, pero que ya ha perdido la magia.
Pero esta no es toda la historia de Quadrophenia, que tuvo una segunda vida cuando en 1979, seis años después del disco, se estrenó una película con el mismo nombre que retrataba a la juventud británica de los años sesenta. Esta película fue la que realmente impactó en España y ayudó a crear una pequeña escena modernista a principios de los ochenta despuntó en nuestro país. Es esa escena la que cierra el libro, con opiniones de quienes recogieron el testigo, desde Emilio López, de Los Elegantes, a Alejandro Díez, de Los Flechazos o Cooper, pasando por Ricky Gil, de Brighton 64 —su hermano Albert es quien escribe el prólogo—, Carles Estrada, de Los Negativos, o Joaquín Felipe, de Los Fresones Rebeldes.
En el libro, la precisión de Oró es marca de estilo, una marca de estilo que va avanzando de manera sencilla, transparente, asumiendo que lo que quiere explicar es lo que importa. Y lo hace sin dejarse nada, con una andadura metódica en la que el disco actúa como sustrato subterráneo que da vida a una historia tan bien contada que florece casi como novela.
–
Anterior crítica de libros: Tengo algunas preguntas para usted, de Rebecca Makkai.