«Consiguieron una suma de emoción muy elevada entre la poesía recitada, la música clásica y el rock»
Alberto Pérez, al que conocimos como guitarrista de Izal, acaba de iniciar su andadura en solitario bajo el nombre de Alberttinny. Hace unas semanas presentaba su primer single, “Mi propio incendio” y, hace tan solo unos días, el segundo, “Causas perdidas”. El proyecto, sin duda, ya ha echado a rodar. Y promete. Sin embargo, hoy, Alberttinny viene a hablarnos del disco que le cambió la vida, y es ese no es otro que Poesía básica, el álbum que crearon juntos Extremoduro y Platero y Tú —bautizados para la ocasión como Extrechinato y Tú— en torno a la poesía de Manolo Chinato. Un disco histórico, que nuestro compañero Javier M. Alcaraz convirtió en libro en Efe Eme —Poesía básica. Extrechinato y Tú ensancha el alma— y se ha convertido en uno de los tesoros de nuestra Colección Elepé.
Extrechinato y Tú
Poesía básica
DRO / EastWest Spain, 2001
Texto: ALBERTO PÉREZ / EFE EME.
Así recuerda Alberto Pérez cómo consiguió tener en sus manos Poesía básica, de Extrechinato y Tú, el disco que ha elegido como uno de esos fundamentales de su vida. Una historia de pérdidas y reencuentros que él mismo nos relata: «Lo compré en formato cedé sobre el 2002, a través del catálogo de tiendas TIPO que llegaba mensualmente a mi casa. A pesar de que en Mérida había tienda física, vivía en un pueblo cercano y no tenía demasiadas posibilidades para moverme; así que tiraba de catálogo para comprar discos y algo de merchand de las bandas que me gustaban. No recuerdo cuánto me costó, pero sí recuerdo que al tiempo lo perdí, supongo que al prestárselo a alguien a quien no debía. Por casualidad, hace un par de años, lo encontré en la sección de discos de Fnac, la única unidad que había y me lo llevé a casa».
Como es de suponer, este no fue el primer disco que compró, pero el camino ya estaba iniciado, leed: «No fue el primero, antes ya había comprado algunos de Extremoduro y Reincidentes. El primer disco en entrar en casa que no lo hubieran comprado mis padres fue Iros todos a tomar por culo, de Extremoduro, comprado por mi hermano Andrés».
No fue el primero, pero sí tomó un cariz especial para él desde el principio: «En esa época era muy seguidor tanto de Extremoduro como de Platero y Tú, así que no fue difícil llegar a él. En cuanto lo vi, lo compré sin dudar. En aquel momento me encantó, pero no era consciente de lo especial que es. A nivel musical tiene canciones enormes y arreglos impresionantes. “Tres puertas” —que escucho mientras escribo aquí— aún me genera unas imágenes mentales muy potentes, creo que consiguieron una suma de emoción muy elevada entre la poesía recitada, la música clásica y el rock. Y todo lo contrario con la dulzura poética y musical en “Juguete de amor”, que he escuchado en bucle durante mucho tiempo».
Extrechinato y Tú fue un experimento finito, no se alargó en el tiempo la unión de Extremoduro y Platero y Tú, pero sí logró dejar una huella imborrable que Alberto así reconoce también: «En este caso, al ser una unión momentánea que no se volvió a repetir, me pregunto si algún día volverán a hacer algo. No negaré que iría rápidamente a escuchar y comprar si presentaran algo nuevo, pero en mi contexto vital, a mis 17 años asociado a este disco, me quedo con que es uno de mis discos de cabecera. Un disco que pongo frecuentemente porque me transporta a una etapa bonita de mi vida».
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