“Los músicos, creadores y productores más grandes con los que he trabajado y a los que más he admirado han sido siempre, de manera casual (o puede que no tanto), los que más cómodo e incómodo a la vez me han hecho sentir y los que más y mejor han sacado de mí. Han sido los más generosos y los más humildes al mismo tiempo”
Formó parte de The Sunday Drivers y Amigos Imaginarios y ahora milita en Egon Soda, pero al margen de su trayectoria como músico, Bautista se ha labrado una carrera en la producción, donde ha dejado su impronta en discos de Christina Rosenvinge, Russian Red, Tulsa o Jero Romero. Se somete a nuestro cuestionario para reflexionar acerca de esa segunda faceta en el estudio de grabación.
Texto: JAVIER DE TORRES / ARANCHA MORENO.
¿Cómo explicarías la labor de un productor?
Podríamos decir, de manera muy rápida, que es quien toma las decisiones. El productor es la persona que tiene la responsabilidad global sobre el trabajo, porque en todo momento tiene o intenta tener una visión global del mismo, mucho antes incluso de entrar a grabar. Es la persona que se va a la cama sin dormir pensando en si tal arreglo o tal toma han sido las buenas o las mejores para conseguir el objetivo perseguido… Es quien conduce y dirige el camino, el color y el concepto general del disco, sirviéndose de todos los medios a su alcance, entre ellos, por ejemplo, el arte del arreglo. Y también es un poco psicólogo y diplomático (ríe), porque hay que conciliar a todo el mundo en el estudio y sacar lo mejor de cada uno.
¿Por qué discos te conocemos?
Como productor, quizá mis trabajos más conocidos sean con Jero Romero en nuestros dos discos, “Cabeza de león” (2011) y “La grieta” (2014) o, más recientemente, coproductor también en “La calma chicha” (2015) de Tulsa, junto a Miren Iza y Carasueño. Pero he sido también durante muchos años escudero de Christina Rosenvinge o Russian Red, donde he compartido labores de composición y de preproducción, he trabajado con Coque Malla como guitarrista en “Mujeres”, formé parte de The Sunday Drivers y Amigos Imaginarios como teclista… Y desde hace dos discos mi banda es Egon Soda.
¿Dónde empieza normalmente tu trabajo con un artista: en el local de ensayo, en el estudio…?
En realidad suele empezar casi siempre en el local, y muchas veces en sus casas. Me gusta mucho trabajar con la gente en un “hábitat” acogedor, sentado en el salón, escuchando discos, hablando sobre música, con la guitarra entre los brazos o con un piano a mi lado. Para mí la mejor forma de trabajar es esa: compartir e intercambiar música, hablar, escucharse y tocar. A raíz de esto viene todo lo demás.
¿Intervienes en la estructura de las canciones?
Sí, si se da el caso. A veces las canciones vienen cerradas y si me parece bien la estructura no tengo nada que objetar. Pero si me sugieren algún cambio o algo no me funciona, siempre propongo alternativas, claro. Me gusta trabajar de manera horizontal, desde el concepto global del disco hasta dónde va un bombo o una caja o qué estamos contando en la letra. No me centro en un aspecto único. Así lo intento.
¿Cuáles son tus estudios de grabación preferidos y con qué ingenieros sueles trabajar?
Durante muchos años trabajé y aprendí muchísimo con Dany Richter en El Lado Izquierdo. Últimamente, porque me gusta cambiar y evolucionar, estoy trabajando en Subsonic Estudios, con Antonio Pérez e Iván González “Chapo”, mis socios a los mandos.
¿Prefieres trabajar en un proyecto desde cero, con las canciones desnudas, o te sientes más cómodo trabajando con grupos o artistas que llegan a ti con un sonido definido?
La verdad es que me adapto a lo que venga. De las dos formas disfruto y aprendo. Cada manera supone un reto diferente.
¿Tienes músicos habituales o de cabecera a los que habitualmente recurres cuando tienes la posibilidad de hacerlo?
Más o menos. Lo que ocurre es que en el 90% de las ocasiones, si la banda no está al completo o se trata de un artista en solitario, suelo grabar yo prácticamente toda o gran parte de la instrumentación (bajos, guitarras, teclados, coros, percusiones…).
¿Puedes destacar alguna producción en la que hayas disfrutado especialmente?
“Bailar en la cueva”, de Jorge Drexler. He elegido un ejemplo en el que no soy productor (mucho me quedaría para poder estar siquiera a la altura), pero que me ha marcado enormemente para lo sucesivo. Al margen de grabar mis partes en el estudio, Jorge me invitó a las dos semanas previas a la grabación del disco, en las que hicimos la preproducción. Durante ese tiempo trabajamos el concepto y el espíritu de las canciones y de los arreglos. Regalarme esos días junto a Carles “Campi” Campón y Sebastián Merlín ha sido uno de los mayores aprendizajes de mi vida y de los momentos en los que más he disfrutado haciendo música.
¿Cuándo das por terminado un disco?
Un disco podría no acabarse nunca si no se quiere, está claro. Suelo escuchar a menudo todas las producciones que hago. Soy fan de los grupos con los que trabajo y de sus canciones, así que, si me pongo en el coche el disco y ya no presto atención a nada, tan sólo canto los temas, es que he llegado buen puerto.
¿Cuál es la mejor lección que has aprendido en un estudio?
Los músicos, creadores y productores más grandes con los que he trabajado y a los que más he admirado han sido siempre, de manera casual (o puede que no tanto), los que más cómodo e incómodo a la vez me han hecho sentir y los que más y mejor han sacado de mí. Han sido los más generosos y los más humildes al mismo tiempo. Tratar de ser humilde, sencillo y elegante pero sincero y firme es con lo que me quedaría. Intentar sacar lo mejor de la gente, como los demás han hecho conmigo, es lo que intento. Creo que también es patrimonio de un buen productor.
A nivel nacional o internacional, ¿qué producciones han supuesto un referente para ti? Tres ejemplos.
Por ejemplo, “Sea change” de Beck, “Maniobras de escapismo” de Love of Lesbian y “Ram” de Paul McCartney.
Tres artistas españoles a los que te gustaría producir. Solo tres.
Me encantaría currar con grupos como Rufus T. Firefly, Modelo de Respuesta Polar o Carmen Boza.
¿En qué disco estás trabajando ahora?
Ahora mismo estoy terminando un disco muy bonito de Félix Lineker y esperando a que salga a la calle el próximo trabajo de Lucía Scansetti.
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Anterior entrega de Productores musicales: Juan de Dios Martín.
