Cuban Beats.
El festival Pirineos Sur estrena “Latido Latino”, la noche más «festivalera» con seis horas de música y cuatro banda”.
Esta noche se subirá al escenario de Sallent la banda franco-argelina Temenik Electric «que harán una muestra de su dominio del electro rock con raíces árabes”, dice la nota de prensa.
“Sallent de Gállego, jueves 28 de julio. Serán más de seis horas de música en las que actuarán cuatro bandas y se podrá descubrir los mejores sonidos de la música latina. Mañana se celebrará una jornada especial llamada “Latido latino”, en la que actuarán en el escenario flotante de Lanuza Chancha Vía Circuito, Rumbanamá, Cuban Beats Star y Chico Trujillo.
“Latido Latino”, que será la jornada de conciertos más extensa que se ha celebrado en los veinticinco años de Pirineos Sur (desde las 20 horas hasta las 2.30 horas), nace con la intención de ser una noche completamente diferente, acercándose más al concepto más clásico de festival.
Previamente, a las 12:15 horas en la terraza del Hotel Saliecho, se ofrecerá una rueda de prensa para hacer balance de la XXV edición del festival y hablar de “Latido Latino”. La convocatoria contará con Luis Lles, director artístico del festival, Berta Fernández, encargada de cultura de la DPH; Begoña Puértoles, directora ejecutiva del festival y todos los artistas que actuarán por la noche.
De Cuba a España pasando por El Congo
Sin duda, uno de los mayores atractivos será ver a Cuban Beats Star, el nuevo proyecto de varios miembros de los desaparecidos Orishas. No menos interesante será Rumbanamá, nombre de un proyecto que propone un recorrido por los lugares más emblemáticos de la rumba: Cuba, España y El Congo. Entre su extensa formación, que incluye a más de 20 músicos, destacan las voces de Parrita, los cubanos Ludmila Mercerón y Rigoberto Nieto y el congoleño Nymoba, y el piano de Ewerton Oliveira. También habrá gente dela tierra: el guitarrista de Nacho Estévez “El Niño y el trompetista Gerardo López.
La renovación de la música sudamericana
Tras el nombre de Chancha Vía Circuito se esconde en realidad el productor argentino Pedro Canale, experto en fusionar cumbia ritmos originarios del Brasil, arpas paraguayas, mística andina, la soledad pampeana del folklore argentino y música electrónica futurista post-dubstep.
Chico Trujillo es la banda sonora de todas las fiestas. Su mezcla de cumbia clásica, bolero, música latinoamericana, balcánica y reggae, les ha asegurado un público de todas las generaciones. Él ha sabido mezclar pedazos del pasado con la influencia global de la cultura alternativa y lo han fusionado todo bajo la bandera panamericana de la cumbia.
Esta noche, concierto de Temenik Electric
El viaje sonoro que estamos disfrutando esta semana nos llevará esta noche a Francia y Argelia, con la actuación de Temenik Electric. Este proyecto franco-argelino ofrecerá una muestra de su mezcla de rock, música árabe y electrónica. Experimentan con la exuberancia de las culturas mediterráneas y la música.
Aclamado por la crítica internacional por su álbut debut, Temenik Electric está de vuelta con “Inch’Allah Baby”, 10 pistas irradiadas de rock árabe, amplificadas por el viento siroco y con incrustaciones de pop futurista.
“Días de Sur”, a pleno rendimiento
Pirineos Sur es un festival participativo y este fin de semana lo vuelve a demostrar con la amplia oferta de actividades del programa “Días de Sur”. Esta mañana se ha celebrado la primera sesión del taller de construcción de didgeridoos, que continuará a lo largo de las dos próximas jornadas, hasta el 30 de julio, con sesiones de 4 horas diarias.
También será participativo el taller de swing, que impartirá Cristina Suárez, a partir de mañana, en el polideportivo de Sallent. Fundadora del club que fue pionero en promover la cultura y eventos de Retroamericana en Madrid, el Madrid Vintage Club, la bailarina ofrecerá dos sesiones (días 29 y 30), de dos horas cada una. La actividad requiere inscripción previa obligatoria y tendrá un coste de 5 euros por persona. Se ofertarán 30 plazas y es un taller abierto a todo el mundo, no requiere acudir en pareja y ni si quiera es necesario saber bailar. Es una propuesta de gran vitalidad, que incentiva la alegría y huye de los formalismo, para facilitar el aprendizaje y la conexión con la música”.
