En este artículo, analizamos con calma el nuevo disco de Paul Weller, la versión en vivo de 22 Dreams, su álbum del pasado año. No cabe duda de que el veterano mod está atravesando uno de sus mejores momentos artísticos.
Texto: ÀLEX ORÓ.
Paul Weller lo ha vuelto a hacer. El “modfather” ha sabido aprovechar la estela comercial de 22 Dreams, su exitoso disco de estudio de 2008, para entregarnos su versión en directo. Si a As is now (2005), le siguió Catch-Flame! Live at Alexandra Palace (2006), 22 Dreams ha tenido su secuela en vivo en Just a Dream. 22 Dreams Live (Island/Universal). Weller es un hombre que siempre ha sabido rentabilizar su cancionero y tras las enormes ventas de su último disco en Reino Unido, no se podía quedar con los brazos cruzados para sacar el máximo rédito posible a un LP que cosechó excelentes críticas.
No obstante, Weller también es un músico honesto y siempre intenta dar a sus fans algo diferente para hacerles atractiva la compra del “producto”. En esta ocasión se trata de un DVD-CD magníficamente presentado. En el DVD hay el material más interesante, ya que incluye un concierto grabado especialmente para la BBC 4 en diciembre de 2008. En dicha actuación, el “modfather” y sus fieles Steve Cradock (guitarra), Andy Lewis (bajo), Andy Crofts (teclados) y Steve Pilgrim (batería) desgranan el repertorio de la gira de 22 Dreams pero lo novedoso es que lo hacen acompañados de una sección de cuerda y otra de metales, por lo que el sonido conseguido se asemeja poderosamente al de las versiones de estudio. Además, Weller contó con la colaboración de estrellas invitadas como Graham Coxon, Little Barrie y la violinista Eliza Carthy. Durante todo el bolo, se ve a un Weller cómodo y a gusto con lo que está tocando ya que, seguramente, este formato es el que había imaginado para su gira del año pasado. El soul, el folk, la psicodelia, el R&B, el punk…todo se mezcla para conseguir una masa homogénea, una autentica lección de poderío.
El ex líder de The Jam sabe controlar al máximo los “tempos” de sus vitaminados conciertos y el resultado final sólo puede ser calificado como magnífico. Destacan versiones como las de “Brand new start”, con Cradock a la slide guitar y Pilgrim y Crofts tocando guitarras acústicas y compartiendo el protagonismo vocal con el “jefe” o “One bright star”, reforzada por la sección de cuerda. Es una pena que la mayoría de televisiones públicas de nuestro país no den la oportunidad a los músicos españoles para poder producir y grabar conciertos con estos medios técnicos y artísticos. El DVD se complementa con las imágenes de Rehearsal Sessions, un programa de la cadena privada británica Channel 4 (no hablemos de cómo los canales privados de aquí tratan al rock) que pretende mostrar a los artistas de la forma más primitiva posible, como si ensayaran. Este capítulo incluye temas como “Wild blue Yonder” o “Echoes form the sun” y una entrevista con Weller, a la que no hubiera estado de más que se le hubieran añadido subtítulos para facilitar la comprensión del “slang” que utiliza el hombre y que resulta de difícil asimilación en países de habla no inglesa. La cereza de este pastel audiovisual son los vídeos promocionales de “Echoes from the sun” y “Have your made up your mind”, los dos singles de 22 Dreams.
El CD incluye un concierto de la gira de 2008 grabado en el Brixton Academy, que es una acta notarial de cómo fueron las actuaciones que Weller hizo el año pasado por todo el mundo, incluidas las de Zaragoza, Barcelona y Madrid. Este compacto no aporta tantas novedades sonoras como el DVD pero servirá para recordar cómo sonaba la banda del «modfather» en 2008 y poderlo comparar con los otros directos que ya ha editado en disco y DVD.
En definitiva, Just a Dream puede ser un complemento perfecto para los fans de Weller y una buena oportunidad para los neófitos de conocer las posibilidades de un artista que es un icono del rock en la Gran Bretaña pero cuya popularidad no acaba de despegar en otros países.
