Paul McCartney abandonó ayer lunes Japón tras permanecer varios días hospitalizado en Tokio por una infección vírica. El ex Beatles, de 71 años de edad, llegó a Japón el 15 de mayo para una pequeña gira por el país, pero al contraer un virus tuvo que cancelar los cuatro conciertos previstos más otro programado para mañana en Seúl.
Según informa la promotora de la gira, el estado de salud de McCartney “mejoró durante el día de ayer tras recibir tratamiento médico y ya era lo suficientemente bueno como para que tomase un vuelo”. A pesar de que los médicos autorizaron el viaje, han recomendado que el músico se tome unos días de descanso antes de volver a dar conciertos.