“En 1975, quince años exactos después de su debut, Johnny Halliday decide rendir un tributo definitivo a sus grandes ídolos”
Johnny Halliday
“Rock à Memphis”
PHILLIPS, 1975
Texto: EDUARDO IZQUIERDO.
Solo por su portada, este disco ya merecería un pequeño lugar en el Olimpo del rock and roll. En ella encontramos a un Johnny Halliday con actitud chulesca recordando, cómo no, a su admirado Elvis Presley. Y es que por algo este parisino nacido en 1943 fue conocido desde su debut con ‘Hello Johnny’ en 1960 como el Elvis francés.
Un músico que descubrió el rock and roll donde debe hacerse, en los clubes. Concretamente en el Golf Drouot de París, lugar en el que pasaba tardes enteras oyendo sonidos que llegaban a la ciudad de las luces desde el otro lado del Atlántico. Rápidamente quiso ser uno de ellos y con apenas diecisiete años sus canciones ya empezaban a radiarse aunque, por una de esas casualidades de la vida, sus problemas con la sociedad francesa se parecían demasiado a los que su admirado Presley tuvo que superar. La puritana clase media no entendía a ese cantante que se tiraba por el suelo, chillaba, se contorneaba y hasta se rompía la camisa. Pero, como tampoco podía ser de otra manera, la juventud le idolatraba en paralelo y pasó a encabezar lo que se conoció como ola ye-yé, en la que también se encontraba la que sería su mujer, Sylvie Vartan.
En 1975, quince años exactos después de su debut, Johnny Halliday decide rendir un tributo definitivo a sus grandes ídolos y lo hace con este disco al que llama «Rock à Memphis». En él encontramos espléndidas versiones de canciones como ‘Summertime blues’ de Eddie Cochran convertida para la ocasión en ‘La fille de l’été dernier’; ‘Slow down’ de Larry Williams que aquí pasa a ser ‘Dégage’; o ‘Good Golly Miss Molly’ de Little Richard, que responde a ‘Adieu Miss Molly’. Precisamente Richard es el más versionado con hasta cuatro revisiones. Canciones que fueron grabadas con un excelente apoyo instrumental entre los que destaca, por ejemplo, el piano del gran Jim Dickinson, la guitarra de Barry Byrd Bruton y una sorpresa: la presencia no reflejada en los créditos de Jerry Lee Lewis en la adaptación de su ‘High school confidential’ (‘Qu’est-ce que tu fais à l’école?’). Una joya a descubrir.
Anterior entrega de Operación rescate: Banda sonora de “Backbeat”.