Operación rescate: Los Shakers

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«Cantaban en inglés, un detalle que quizás les ha ganado más fácilmente que, por ejemplo, a Los Brincos, el fervor del mercado británico de reediciones, donde se les trata con fervor de fan»

Los Shakers
«¡Por favor!»
ACE, 2002


Texto: LUIS LAPUENTE.


No, no hablamos de los fabulosos Shakers españoles, esa banda seminal fundada en 1963 por tres hijos del realizador José Luis Sáenz de Heredia, que aún hoy continúa sin merecer el reconocimiento sin duda por su actitud genuina y su herencia artística. Los Shakers de la antología «¡Por favor!» proceden de Montevideo (Uruguay), aunque desarrollaron la mayor parte de su carrera en Buenos Aires como el más perfecto epígono de The Beatles en el Cono Sur.

Integrados por Carlos “Caio” Vila, Roberto “Pelín” Capobianco y los hermanos Osvaldo y Hugo Fattoruso, Los Shakers fueron bautizados por la prensa de la época como “los Beatles del Río de La Plata”. Un apelativo que se ganaron a pulso, y no solo por la pose y la indumentaria, calcadas de las de los Fab Four, sino, sobre todo, por esas voces cristalinas y contagiosas, esos estribillos y esos riffs instantáneos, esa pasmosa capacidad para resumir en apenas tres minutos todo un caudal de emociones juveniles. Sí, Los Shakers emularon perfectamente en su tierra el pop de raíz anglosajona a mediados de la década prodigiosa. Además, cantaban en inglés, un detalle que quizás les ha ganado más fácilmente que, por ejemplo, a Los Brincos, el fervor del mercado británico de reediciones, donde se les trata con fervor de fan.

Los Shakers tuvieron una vida corta e intensa como grupo: apenas cuatro años (1964-68), que produjeron tres álbumes soberbios («Los Shakers», «Shakers for you» y «La conferencia secreta del Toto’s Bar»), a medio camino entre el puro merseybeat de ‘Love me do’ y la psicodelia efervescente y naïf de ‘Lucy in the sky with diamonds’. Una herencia que puede revisarse en todo su esplendor en esta suculenta antología publicada en Inglaterra por Ace Records: treinta y dos canciones maravillosas, algunas legendarias (‘Break it all’, ‘Shake in the streets’, ‘The shape of a rainbow’), que invitan a disfrutar y a disparar los adjetivos. Fundamental para sibaritas del pop de los años 60.

[Texto publicado originalmente en EFE EME 45, de septiembre de 2002.]

Anterior entrega de Operación rescate: Karina.

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