Pedro Ruy-Blas / Dolores
Asa nisi, masa
LP: POLYDOR, 1978
VALOR: 130 Euros
Una sección de VICENTE FABUEL.
Contestando a más de un curioso en torno al supuestamente fluctuante precio de los discos, habría que aclarar que el valor que acompaña a cada uno de los chequeados en esta sección respondería únicamente cuando el estado del mismo (tanto el vinilo como su carpeta) rozase la perfección, esa valoración como “Mint Condition” acuñada por las principales revistas internacionales de coleccionismo discográfico. A partir de ahí y hacia abajo (EX / VG++/ VG+ / VG / POOR), y en función del desgaste acumulado tras su uso, el precio descendería vertiginosamente con la lógica propia de cada uno de los profesionales del ramo. Otra cosa serían las oscilaciones que la cotización de un artista o un disco (al alza o a la baja) vayan sufriendo a través del tiempo. Quiere decirse que ésta u otras valoraciones únicamente responden al presente y que –en definitiva– todas ellas tienen fecha de caducidad. Suerte, pues.
El cuarto y último LP de Pedro Ruy-Blas y Dolores que hoy se valora aún no ha sido reeditado en CD. Para localizar el resto de discografía del vocalista madrileño con el grupo Dolores (desde el 75 al 78), así como sus años mozos con los extraordinarios Grimm y primeros singles en solitario (desde el 68 al 74) se puede acceder a los dos CDs que el sello Rama Lama ofrece con su habitual justiprecio, o recurrir a los inciertos vaivenes del mercado del vinilo como, hoy por hoy, obligatoriamente hay que hacer con este estupendo Asa nisi, masa. A la chita callando y quizás más aupado por el eco internacional de sus discos que por el propio impacto local, la pequeña leyenda del grupo que se formara en torno al gran Pedro Ruy-Blas ha ido creciendo hasta ocupar el puesto de privilegio que hoy atesora en el mundo de la fusión. Algo tardío reconocimiento si se tiene en cuenta que el primer disco de la formación apareció en 1975, cuatro años antes que La leyenda del tiempo de Camarón. Y además, compartiendo músicos.
Pero a salvo de algún momento aislado, el grupo Dolores nunca hizo fusión flamenca “ad hoc”. Formados básicamente con antiguos miembros de los Grimm (Tomás Vega, Tomas San Miguel, Carlos de la Iglesia), los Canarios (álvaro Yébenes, Alfredo Mahiques, el propio Ruy-Blas), jóvenes revelaciones de la escena jazzy de Madrid (Jorge Pardo) y variados percusionistas de Sudamérica (Rubén Dantas, Álvaro Tarquino), el combo practicó una original suerte de fusión jazzística con raíces hispanas que nunca, bajo ningún sentido, dejó de mirar a Brasil. Quizás su disco más conocido internacionalmente, fue editado en Inglaterra y Japón, así como uno de los más variados y logrados, Asa nisi, masa –titulo que alude a las enigmáticas palabras que Marcello Mastroianni repetía como un mantra obsesivo en el film de Fellini 8 ½– mostraba a su cantante huyendo de las textos, volcándose de forma cada vez más personal en la técnica vocal del scat, y como guinda contando con la colaboración del gran Paco de Lucía en el corte que abre el LP, “¿Por dónde caminas?”. No se equivocaron, “brazilian rhythms meets flamenco guitar” lo habían definido los periodistas ingleses dos años antes cuando Dolores había sido el grupo de acompañamiento del guitarrista, terminando juntos y de forma apoteósica su gira europea en el londinense Queen Elisabeth Hall. Un disco pletórico y valiente, y como tal justamente valorado internacionalmente.