La Junta de Andalucía premia al eximio cantautor gaditano, íntimo de Sabina pero escasamente conocido por el gran público.
Nacido en 1955, El Puerto de Santa María, Cádiz, Javier Ruibal es un cantautor inquieto que siempre con los sonidos de color flamenco por delante, no ha dudado en fusionar su música con el rock o el jazz.
Desde aquel primerizo Duna (1983), pasando por trabajos tan incuestionables como Pensión Triana (1994), la obra de Ruibal es buen ejemplo de tenacidad y honestidad pese al silencio que siempre le rodea desde los medios, refractarios a propuestas tan interesantes como la suya y, esto es importante, en absoluto con vocación de minoritarias.
Nos alegramos de esta distinción, pero que sus canciones se pudieran difundir con normalidad sí sería una buena noticia.