Juan Rivas se dio a conocer en 2000 como parte del grupo vigués Stereocéano, dos años después iniciaba camino en solitario con el sorprendente Devenir del paraíso (que fue destacado como disco del mes en EFE EME), al que le seguiría en 2004 Un día es demasiado. Entre el electrolounge, la música tropical y grandes influencias de Golpes Bajos, Rivas ha sabido forjarse una identidad propia de cantautor a su aire, moderno y bailable.
A finales de abril, Rivas publicará su tercer álbum en solitario, Mundo feliz, producido por Pablo Iglesias, en él ha contado con las colaboraciones de Mastretta, Germán Coppini, Pablo Novoa y, agárrense donde puedan, Massiel, en la que se anuncia como su primera grabación en 15 años. Pero, por si no fuera bastante, tirando la casa por la ventana, también participa el genio brasileño Eumir Deodato (músico, productor, arreglista, ha trabajado con gente tan diversa como Frank Sinatra o Björk, y sus discos en solitario son fascinantes ejercicios de pura creación experimental). ¿Que cómo ha logrado Rivas que Deodato esté en su disco? Desvelaremos el misterio próximamente.
