«Cabe mucha música en los tiempos medios, templados, que manejan y lo hacen francamente bien. De hecho, llama la atención su capacidad para crear una atmósfera musical con muchísima personalidad, capaz de atrapar por sí sola»
El murciano Maez se presentó esta semana en Madrid junto a su grupo en un entrañable concierto. Chema Domínguez estuvo allí y nos lo cuenta.
Maez
19 de octubre de 2011
Sala Moby Dick, Madrid
Texto: CHEMA DOMÍNGUEZ.
Foto: SONIA URBINA.
Antes de la salida de Maez, Carlos Vudú aprovechó su momento como telonero para presentar unas señas de identidad inspiradas en el Quique González de «Personal», los Pereza de «Algo para cantar», el Revólver de «Si no hubiera que correr» o sus paisanos M-Clan en «Usar y tirar». La lista sería más larga pero queda marcada su influencia poprockera. No dispuso de grupo completo y ahí quedó claro que Vudú se defiende y muy bien, gracias a cierta energía que se echa de menos en las bandas actuales de este corte estilístico.
Y llegó Maez. «A short version of what I am supposed to be» es el EP que anda presentando el también murciano, previo al disco que saldrá con el año nuevo, de título «We’ll never make it home». José Herrera (guitarras), Rafa Hernández (bajo), Lucas Albadalejo (teclados), Sergio Romero (batería) y Saray Melo (coros) dan espléndida cobertura sonora a las canciones de Pablo Matías (voz, armónica y guitarras), rostro visible y verdadero responsable de Maez.
Cabe mucha música en los tiempos medios, templados, que manejan y lo hacen francamente bien. De hecho, llama la atención su capacidad para crear una atmósfera musical con muchísima personalidad, capaz de atrapar por sí sola. Si la música, el sonido, tiene la tarea de conectarnos a los sentimientos o despertar emociones, Maez ya cumple. Sin duda, Suso Saiz, productor del disco, que andaba por ahí y no dudó en vitorearles, está orgulloso de ellos por algo.
La nota sube aún más al aportar los textos, aunque las referencias musicales de Maez son variadas (la mayoría pueden situarse en el folk, el country, el pop-rock o el soul), el sentido de cantautor de Maez lo aglutina todo de forma natural creando un estilo novedoso, personal. Pero les gusta interactuar con el personal, dar espectáculo y dar que hablar. La base rítmica tira magníficamente, los teclados vibraron a gran altura, sobre todo en el registro Hammond, las cuerdas acústicas, eléctricas en plan slide e unían a unos coros fantásticos, casi a lo Aretha cuando llegó ‘When I was a kid’. La voz de Maez nos dejó otros excelentes momentos como ‘Hate you’ o ‘Typical song’. Esperemos, deseo, que esto no se quede solo entre nosotros.
