“Jugamos a que nos respetamos, a que nos parece bien que haya diferentes opiniones, pero en el fondo queremos imponer la nuestra”
Eduardo Izquierdo analiza el nuevo álbum de Ray Davies junto a los Jayhawks y la defensa que hacen de él los seguidores del músico británico en las redes sociales.
Texto: EDUARDO IZQUIERDO.
¡Qué curiosas son las redes sociales! Estos días nos agolpamos en ellas seguidores acérrimos del nuevo disco de Ray Davies y algunos que no lo somos tanto. Todos creemos tener la razón. De manera rotunda, además. Jugamos a que nos respetamos, a que nos parece bien que haya diferentes opiniones, pero en el fondo queremos imponer la nuestra. Y aquí vengo a hacer lo propio con los lectores de Efe Eme. Tras frases como “Ray Davies no hace disco malo”, “Ray es un género en sí mismo” o “Disco del año, seguro, si están los Jayhawks” llegan las tres afirmaciones que más me llaman la atención por parte de los defensores de este “Americana” (Legacy, 2017): “Eso es que no lo has escuchado las suficientes veces”, “Este disco es de los que cuestan pero una vez te engancha es una obra maestra” o “Eso es que no lo entiendes”. Vayamos por partes y analicemos esas seis repetidas frases.
“Ray Davies no hace disco malo”. Perdonen, pero no cuela. Todo el mundo puede hacer un disco malo, tener un traspié. A pesar de eso, este disco no lo es, quede claro, pero ser tan rotundo con una afirmación así…. No considero que “Americana” sea un mal disco, simplemente no es lo que esperaba del talento de Ray, probablemente uno de los diez mejores compositores de la historia del rock. En mi opinión es excesivamente largo y solo algunas canciones dan la talla. Entre ellas estarían ‘I’ve Heard That Beat Before’, con ese ambiente semi swing, que recuerda a los Kinks más americanos; los más de cinco minutos de la operística ‘A Place in Your Heart’ o la enérgica y dinámica ‘The Great Highway’
“Ray es un género en sí mismo”. Miren, ahí sí que tienen razón, pero eso no hace que sea infalible, ¿no? Es cierto que la habilidad en la composición de Sir Ray Davies está por encima de la media, y que su manera de entender la música lo hace especial. Es cierto también que, a pesar de su título, este no es un disco de Americana. Aunque, en ese caso, titularlo así y compartir créditos con The Jayhawks sea la mejor manera para confundir al personal. Además, que es un género en sí mismo también lo atesoran dos temas tan aburridos como los recitados ‘Silent Movies’ y ‘The Man Upstairs’, a todas luces innecesarios.
“Disco del año, seguro, si están los Jayhawks”. A ver, podría citar ahora mismo de carrerilla diez discos de este año que para mí mejoran a este, y que estén los Jayhawks no es ninguna garantía tampoco. De hecho estas uniones no suelen acabar de funcionar y aquí tampoco lo hace. Eso sí, es justo reconocer que los mejores momentos del disco los suele protagonizar Karen Grotberg. Buen ejemplo de ello es la anteriormente citada ‘A Place in Your Heart’. Quizá el momento con más química del disco se lo lleva ‘Poetry’ con un excelente trabajo de guitarras y unos coros puro Jayhawks.
“Eso es que no lo has escuchado las suficientes veces”. Esta es de las que más gracia me hace. Básicamente por dos motivos. Primero, porque se afirma sin conocimiento de causa. Nadie sabe las veces que yo he escuchado este disco y, por si a alguien le interesa, superan la decena a la hora de escribir estas líneas. Dos, las hace gente que aseguraba que el álbum iba a ser una maravilla ¡antes de que saliera! Un poco contradictorio, ¿no?
“Este disco es de los que cuestan, pero una vez te engancha, es una obra maestra”. Pues aunque sea así, no tengo ganas. No necesito discos que me cueste escuchar. No estoy en esa fase de mi vida, qué se le va a hacer. Ya estoy rodeado de suficientes cosas que me cuestan. Para mí la música es un placer, no un suplicio. No la entiendo como algo que deba suponer un esfuerzo. No diré que necesito discos fáciles, pero sí que tengan algo que me enganche desde el primer momento, aunque luego vaya descubriendo otras cosas.
“Eso es que no lo entiendes”. La mejor de todas. Si digo que el álbum no me gusta (aplíquese no solo al bueno de Ray, sino a cualquier otro artista), hay quien me dirá que lo que pasa es que soy tonto. Sí, señores, no se justifiquen. Es fácil. Filosofía socrática. Ustedes lo entienden y yo no. O sea, que ustedes son los listos y yo el tonto. Quizá tienen hasta razón. Temas tan anodinos como ‘Change for Change’ o ‘Message for the Road’ no los entiendo. ¿Ustedes sí?