Los hijos de los Beatles están dispuestos a emular a sus padres y formar un grupo. La idea ha surgido de James McCartney, de 34 años. Sean Lennon y Dhani Harrison parecen dispuestos a secundarlo. El más reticente es Zak Starkey, el vástago de Ringo Starr.
“No creo que sea algo que Zak quiera hacer. Tal vez Jason [batería y otro de los otros hijos de Ringo] querría hacerlo. Yo lo haría. Sean parece estar de acuerdo, Dhani también. Yo estaría encantado de hacerlo”, ha declarado James McCartney, que espera que realmente suceda: “Sí, es de esperar, naturalmente. No sé, tendría que esperar a ver. Con la voluntad de Dios, el apoyo de la naturaleza… supongo que sí”. Vale, ¿y para qué esto? ¿No es un poco tontuno y una forma de rebajar a chiste el legado de sus padres?
