Malpaso publica el 15 de junio “Cómo ser grosero e influir en los demás. Memorias de un bocazas”, de Lenny Bruce (Mineola, Nueva York, 1925 – Los Ángeles, 1966), “el humorista norteamericano más corrosivo y menos benigno de su época, murió a los cuarenta años por una sobredosis de morfina”.
“Este libro es un monumento a la rabia y la risa. Instigado por Hugh Hefner (que iría publicando cada entrega en la revista Playboy), Lenny Bruce escribió su autobiografía entre 1963 y 1965, cuando un sonoro juicio por obscenidad y la implacable persecución de los virtuosos ya lo habían convertido en el paria más célebre de Estados Unidos. Fue su último cartucho para ajustar cuentas con los guardianes del orden que lo había acosado desde los inicios de su carrera.
Empezó en sórdidos locales de estriptis y tugurios malolientes, pasó por escenarios míticos como el Fillmore de San Francisco e incluso llegó a pisar el cielo en el Carnegie Hall neoyorquino, pero sus demonios lo arrojaban siempre a los infiernos y sus sátiras a los banquillos. La morfina se lo llevó al otro mundo mientras una apelación era sometida al escrutinio del tribunal correspondiente. Fue indultado a título póstumo en el año 2003”.