Los recientes problemas de salud de Lemmy, líder de los británicos Motörhead, han afectado a su estilo de vida: ya no prueba ni las bebidas alcohólicas de alta graduación, como el whisky y el vodka, ni las azucaradas, como la Coca-Cola (por la diabetes), ahora toma zumo de naranja.
También se ha visto obligado a caminar con la ayuda de un bastón, porque “las piernas están jodidas”. Aunque asegura, en “The Guardian”, que es “indestructible” y que Motörhead continuarán mientras él sea capaz de “recorrer sin bastón la distancia que hay entre el fondo y el frente del escenario”.
El 28 de agosto llega el nuevo larga duración de Motörhead, “Bad Magic”. Luego, a principios de 2016, la banda se embarcará en una gira por el Reino Unido.