De completo éxito cabe considerar la campaña de Coldplay ofreciendo en descarga gratuita el tema que avanza su próximo disco: más de 600.000 internautas se descargaron la canción sólo en las primeras 24 horas. Lo que demuestra que estas iniciativas de puro marketing funcionan, y además son gratis. Sí, completamente gratuitas, tanto para la discográfica como para el grupo. El sueño calenturiento de cualquier publicista hecho realidad. Y es que somos tantos los medios mundiales, esencialmente digitales –y no necesariamente especializados, que los generalistas también entran a saco en este juego–, que tenemos que llenar nuestros portales con noticias que nos hacemos eco de casi cualquier cosa, y si lleva el nombre de un grupo anglosajón de relumbrón asociado al adjetivo «gratuito», ni lo pensamos un segundo: ¡Tonto el último que publique! ¡Imbécil el que no se haga eco!
El método es sencillo, avisas al NME o similar, y el efecto dominó entra en funcionamiento. En horas, no hay rincón del planeta que no haya traducido a su idioma la buena nueva: en este caso, que Coldplay regala su nuevo single. Aunque quizás el regalo no sea tal, ya que que para descargarte la canción de marras –ofrecida como gratuita–, tienes que registrarte en la web de Coldplay dejando tu email, el código postal y el país. Con lo que discográfica y grupo se hacen con una fabulosa colección de direcciones de correo electrónico de seguidores de la banda, segmentada por países y ciudades.
Al final, la campaña resulta redonda se mire por donde se mire: el presupuesto es mínimo (unas libras en banda ancha para que la web no se colapse en exceso), no tienes que preocuparte porque las radios del planeta pinchen tu canción ya que gracias a la «noticia» llegas directamente a cientos de miles de personas de las que, además, te haces con su email y, para colmo, quedas como un señor de lo más estupendo «regalando» tu canción a los fans. ¿Lo próximo? Dos conciertos –quizás tres si Barcelona se suma a Londres y Nueva York– gratuitos del grupo. A ver si con el eco mediático generamos la necesidad de «estar» en alguno de los próximos bolos «paganos» de Martin y sus socios.
Nuestra más sincera felicitación al cerebro que ha diseñado este lanzamiento.
Por cierto, ¿alguien ha opinado sobre la calidad musical de «Violet hill», la canción que nos traía aquí?
JUAN PUCHADES.
