Anoche, en el primero de sus dos concierto madrileños, Joaquín Sabina se sintió mal y en escena anunció estar sufriendo «un Pastora Soler», en referencia al miedo escénico que sufre la cantante. Pese a ello, el cantautor llevó la actuación hasta el final durante casi dos horas, pero suspendió los bises.
Su mánager, Berry Navarro, ha comunicado que él mismo lo acompañó anoche a casa, que Sabina se sintió mareado y que no finalizó el show por miedo a caerse en escena. También ha informado que «Lo he llamado esta mañana y me ha dicho por WhatssApp que estaba durmiendo, descansado, se encuentra bien, es lo mejor que se puede decir». Añadiendo que se mantiene el concierto programado, también en Madrid, para el próximo martes.
Por supuesto, deseamos que el maestro Sabina se restablezca lo antes posible.