EL MIÉRCOLES, CANCIÓN
«Pura catarsis en manos de un tipo capaz de hacer enorme lo sutil»
El músico sueco reaparece en escena con “Every little heart”, el primer avance de su nuevo disco previsto para ver la luz en abril. Se trata de una tema optimista, pero con imponente trasfondo emocional, que presenta el primer proyecto de The Tallest Man On Earth acompañado de una banda. Y suena realmente bien.
Texto: SARA MORALES.
Esta semana hemos visto a Iván Ferreiro ofrecer otro aperitivo de su próximo disco, y lo ha hecho con el tema “La humanidad y la tierra” junto a Tanxugueiras; también a Vermú y su “Me va quemando”, a Escuelas Pías con “Los dioses suicidas”, a Impacto Vudú con “Otro año más” y a Alberto & García presentando “Arde París”. Sin embargo y, a pesar del peso pesado de todos estos estrenos, la nueva canción de The Tallest Man On Earth ha sido la elegida como nuestra banda sonora de estos últimos días.
Se trata de “Every little heart”, un tema delicado e introspectivo con el que el músico sueco ha aprovechado para anunciar el lanzamiento de su próximo disco, Henry St. Este álbum, que verá la luz el próximo 14 de abril de la mano de ANTI-, llegará tras cuatro años en silencio desde I love you. It’s a fever dream, si pensamos en discos con material propio y nuevo; aunque, en realidad, no hace tanto que lanzaba al mundo su elepé de versiones, Too late for edelweiss (2022).
Ahora, Kristian Matsson, nombre de pila de el hombre más alto de la Tierra, reaparece con esta canción con la que sigue poniendo de manifiesto su don folk y su espíritu orgánico aunque, esta vez, lo hace acompañado de una banda: «Durante toda mi carrera me he dedicado al do it yourself, sobre todo por la sensación de que no sabía lo que hacía, así que lo hacía todo yo mismo», confiesa. En esta ocasión, la confianza depositada en músicos de acompañamiento no hace más que engrandecer el ya carismático latido al que nos tiene acostumbrados, así que la apuesta, de momento, con este primera avance, parece todo un acierto. Melodías optimistas, toques de jazz y cierto regusto por el pop sixtie, que se enredan en nuestras cabezas de un modo pegadizo y risueño.
“Every little heart” llega acompañado, además, de un videoclip dirigido por Joen Dankers y consiste en la primera parte de una trilogía audiovisual grabada en película Kodak de 16mm. Una pieza que tira de nostalgia, para llegar al punto de equilibrio entre los niños que fuimos y en lo que nos hemos convertido. Porque sobre esa búsqueda interior en la que nos embarcamos a veces para reencontrarnos con nosotros mismos, perdonarnos lo errores y continuar creciendo, trata, al parecer, el nuevo álbum que Matsson tiene previsto. Pura catarsis en manos de un tipo capaz de hacer enorme lo sutil.
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Anterior entrega: “El diablo gritó sí”, de Corizonas.
