En mayo de 1966 John Lennon pronunció la famosa frase en la que afirmaba que los Beatles eran más famosos que Jescristo, lo que molestó a muchos cristianos, especialmente en Estados Unidos. Ante lo cual, Lennon pidió perdón.
El pasado sábado, el diario oficial del Vaticano, L’Osservatore Romano, publicó, con motivo de los cuarenta años de la edición del Álbum blanco, un artículo el que se afirmaba que “El comentario de John Lennon, que provocó una profunda indignación principalmente en Estados Unidos, tras muchos años suena sólo como un ‘alarde’ de un joven inglés de clase trabajadora que enfrentó un inesperado éxito, tras crecer con la leyenda de Elvis y el rock and roll”.
Y acababa destacando que, 38 años después del hecho, las canciones de Lennon y McCartney han mostrado una gran resistencia al paso del tiempo y se han convertido en fuente de inspiración para músicos pop.