Tras ser ninguneados durante quince años, finalmente, los miembros Kiss han sido elegidos para el Rock And Roll Hall Of Fame, pero no por propia voluntad, sino para complacer a sus fans. Paul Stanley, preguntado en “Classic Rock” si considera un honor ingresar en el Rock And Roll Hall Of Fame, responde: “No. Significa mucho para los fans y lo entiendo porque es la validación para ellos. Así que por eso acepto cortésmente y acepto en su favor. Mis sentimientos y mi ambivalencia sobre el Rock And Roll Hall Of Fame no han cambiado. Su actitud es elitista y no refleja la opinión pública. Refleja a un pequeño grupo que dicta quién cumple con los criterios que ellos establecen como rock and roll. Siempre he sentido que el espíritu del rock and roll significaba no solo ignorar a tus críticos, sino también hacer caso omiso de tus compañeros y seguir tu propio camino. Creo que lo hemos hecho, con pocas excepciones, durante cuarenta años.”.
Y añade: “Sin embargo, miro a algunos de los homenajeados y cualquier club que tiene a Jimmy Page, Eric Clapton, los Who, los Beatles y los Stones es una compañía en la que no me importa estar y mis sentimientos no tienen nada que ver con ninguno de ellos, meramente tiene que ver con un sistema que creo que está contaminado, corrompido y distorsionado”.