“El pasajero”, o todos los mundos de Depedro

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“Entre amigos se ha tallado una obra que avanza sin dejar atrás el camino marcado hasta ahora por la formación, porque no le hace falta pirueta extraordinaria para asombrar”

 

El próximo 23 de septiembre verá la luz el nuevo disco de Depedro, y para ir abriendo boca, Efe Eme asistió a la escucha del nuevo disco junto al propio artista, que interpretó algunos temas en directo. Allí estuvo Marta Sanz.

 

Texto y fotos: MARTA SANZ.

 

Jairo Zavala se mueve inquieto entre las mesas del Café La Palma, pero enfila sus pasos al escenario sin titubeo. Desde hace días se puede escuchar en distintas plataformas digitales un adelanto de su nuevo trabajo, pero hoy toca vaciarse los bolsillos al completo. Aunque se confiesa nervioso, cuando rasga la guitarra solo transmite fuerza y ganas de contar. Dice Miguel Ángel Hoyos de “El pasajero” que es “un disco callado pero lleno de sonidos, un disco sencillo pero cargado de mundos”, y en esta definición cabe la obra y el cantante.

Son muchos los mundos y las eras que anticiparon la llegada de DePedro, el grupo que sin demasiadas capas muestra a este músico de Aluche, curtido en mil escenarios diferentes. Con destreza creciente ha sido frente en una banda de rock, ha puesto música a platós de televisión, y ha sido escudero de delicias musicales como Calexico o Amparanoia. Este “antes de” tan escueto es indigno de su trayectoria, pero queremos hablar de un brillante presente por el que merecen la pena estas zancadas. Porque desde hace años, sin dejar de rodar, tiene su propia voz en este proyecto de nombre ajeno en el que solo habla él. Con este nuevo disco vuelve por fin, como una de esas personas a las que se ve de vez en cuando, quizá algo parca en palabras, pero que siempre tiene buenas historias que contar.

Las canciones de Depedro han sido siempre una herida abierta, sin circunloquios literarios que velen la realidad. Verdad sin tapujos. Y en los once latidos de “El pasajero” sigue sin bajar la mirada, cuando vive y cuando cuenta. Por eso a un viajero como él, que ha tocado en los garitos más recónditos de Madrid y ha llegado a escenarios de todo el mundo, se le debe escuchar. En este último diario de viaje respira aires fronterizos en la línea de sus últimos trabajos con canciones como ‘Panamericana’, punto de partida, o ‘¿Quién anda ahí?’, grito reconocible y compartido en cualquier rincón del mundo. Personaliza más la historia, enlazando su voz firme a la de Enrique Bunbury en D.F., homenaje a un México que “amanece riendo”, a una tierra “mágica, enorme y rotunda”.

 

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La cadencia femenina la marca en este trabajo la bella voz de la cantante Gaby Moreno, que brilla en cada tema, pero que deja su alma en ‘Acuérdate’, quizá la canción más novedosa y diferente del disco. El tiempo da paso en ocasiones al vértigo y la reflexión, presentes en ‘Ser valiente’ o ‘Miedo’, o en el auxilio de ‘Déjalo ir’, tema que tiene su hueco en principios y ocasos. Y en esta trama de pensamientos y existencias, tienen también su lugar los capítulos comunes, rutinas de cualquier persona en las que encuentra heroicidad y proeza.

Jairo pone el alma y el argumento a «El pasajero», y con un pequeño acústico demuestra, como cada vez que se sube a un escenario, que no hace falta vestir las canciones para que vivan y transmitan, para que llenen salas y corazones. Pero ya no es ese joven con prisa que saltaba de escenario a furgoneta y tocaba con mediocres instrumentos de segunda mano, y el tiempo le ha permitido disfrutar del indudable privilegio de hacer con calma y muy buena letra una edición bella de sus canciones. Y el traje que vestirán sus versiones oficiales hace crecer cada uno de los temas. Para grabarlos Depedro ha ido de nuevo los estudios Wavelab, en Tucson, y se ha puesto en manos de Chris Schultz. En estos paisajes conocidos y con la suerte de contar entre sus amigos con músicos extraordinarios, se ha dejado disfrutar Joey Burns, y ha puesto su firma el magistral John Convertino. Entre amigos se ha tallado una obra que avanza sin dejar atrás el camino marcado hasta ahora por la formación, porque no le hace falta pirueta extraordinaria para asombrar, ni el avance ha de llevar ritmo distinto al del que canta y cuenta.

El resultado empieza a escucharse estos días de verano, pero no saldrá a la venta hasta después del más abrasador estío, porque “El pasajero” llega a las tiendas el 23 de septiembre, con el nuevo curso y la agenda a estrenar. Entonces Depedro volverá a cargar con su guitarra, a gritar al mundo y a susurrar su alma desde cualquier escenario. Este hombre que sin alardes dice tanto, sin duda, debe ser escuchado.

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