El Estado italiano ha emprendido una campaña contra el fraude fiscal, y ha decidido empezar por las gentes del espectáculo y el “famoseo”. Entre los músicos a los que el Fisco reclama dinero se encuentran Umberto Tozzi y Little Tony.
En concreto, a Tozzi, que tiene residencia oficial en Mónaco, se le reclaman 3,4 millones de euros, al considerar que la residencia en Mónaco es utilizada para evadir impuestos, ya que el músico, según el Fisco, vive habitualmente Italia.
Tozzi ha declarado que lleva residiendo en Mónaco 16 años, y que siempre ha pagado al fisco italiano los impuestos correspondientes a sus ingresos procedentes de su trabajo en Italia. Considera que la acusación es falsa, y el que se declare como ficticia su residencia en Mónaco, lo considera lesivo contra “sus derechos y contra mi absoluta buena fe”.
Otro músico al que se le reclama dinero por fraude fiscal es el intérprete de rock’n’roll y pop Little Tony. De nacionalidad y residencia sanmarinense, se le reclaman 160.000, porque, según la Hacienda italiana, reside más de 180 días al año en Italia,