«Sabe que acertar con la melodía es parte del abecedario básico con el que hay que manejarse para escribir una buena canción. Como esencial es firmar textos cuidados, interesantes, originales y poéticos»
Particulares
«Tiempos mejores»
CASI UN CUENTO RECORS
Texto: JUAN PUCHADES.
Hay discos que por sus propias condiciones de edición están condenados a pasar desapercibidos y solo llegarán a los incondicionales, a los más próximos y, sin embargo, son trabajos que enamoran, que te agarran el alma y la estrujan, que logran que durante sus cuarenta minutos te olvides de todo y quedes atrapado únicamente en la música, como si la vida y sus sinsabores cotidianos quedaran muy lejos. Lo cual viene a demostrar que poco importa de dónde procedan los discos, la marca que lo edite (eso dejémoslo para quienes necesitan que les dirijan e indiquen la ruta a seguir), que lo único que cuenta son las canciones. Y Pepe Curioni sabe mucho de canciones.
Curioni es en realidad Particulares. O Particulares es él, que lo mismo da. Un bajista argentino que pasó años en Barcelona y que desde hace un par de temporadas prueba fortuna en Madrid, aunque escuchándolo no se puede obviar su origen, pues formado con la escucha de los clásicos del rock argentino (los Nebbia, García o Páez), sabe que acertar con la melodía es parte del abecedario básico con el que hay que manejarse para escribir una buena canción. Como esencial es firmar textos cuidados, interesantes, originales y poéticos. Y así, cual alumno aplicado que hace sus deberes con entrega, y con las raíces bien plantadas en su propia tradición, Curioni desarrolla un rock que tiende a la baja intensidad rítmica, lindando con el pop Beatle (otra lección que lleva bien aprendida), oscilando lo mismo hacia el folk-rock (mirando a Wilco) que hacia pasajes donde el pop, el jazz y el funky se pueden enredar entre ellos (trayendo a colación a Steely Dan).
Son diez canciones las que incluye este segundo trabajo de Particulares, y cuesta seleccionar entre ellas, pues es uno de esos discos de equilibrio perfecto cuya escucha se recomienda en su totalidad, disfrutando de cada tema, de esa cierta nostalgia que parece teñirlos a todos y a la que contribuye el cantar suave de Pepe, que tiende a acentuar el clima de algo privado y reducido que tiene el disco, como si estuviéramos ante un show en un club solo para un público muy selecto (los que hayan pagado por el disco, que tampoco serán muchos). Puestos a quedarme, lo hago con ‘Tormenta en la ciudad’ («El pronostico del tiempo / anunciaba lluvias moderadas, / pero siempre se equivocan y hay verdades que te mojan. / ¿Quién puede saber lo que vendrá?») ‘El jardín’, ‘Nuevo despertar’, ‘Caminos’ o ‘El Rastro’ (con letra de I. Penalba) y, por supuesto ‘Las amapolas’ y ‘Tiempos mejores’, ambas con letras prodigiosas de Sergio Makaroff y que Curioni, consciente del material tan especial que tenía entre manos ha musicado como un capo (como ya hicera en el anterior disco con la inoxidable ‘Amuleto’).
Mención especial a la certera producción de Toni Brunet, aunque a nivel de audio, se puede objetar la falta de una mayor dinámica en el master final, pero así es la penuria y bastante es que Particulares pueda grabar.
Quizá no sea fácil localizar «Tiempos mejores», pero si Particulares pasa por tu ciudad, acércate a verlos en directo y hazte con una copia del disco. Tu espítitu te lo agradecera.
–
