«A estas alturas, Los Tsunamis ofrecen un sonido poderoso y crujiente. Más próximos a la costa estadounidense que a las formas hispanas de Los Coronas»
Los Tsunamis
“Amigo neutrón”
RANA DISCOS
Texto: EDUARDO TÉBAR.
Suena extraño, pero Úbeda es una de las grandes canteras de rock and roll de nuestro país. Cuando Los Coronas se anticiparon a Tarantino en la recuperación de reliquias del surf instrumental de principios de los sesenta, el municipio jienense comenzó a parir formaciones como The Gaforic Explosion. Epígonos de Dick Dale y Ventures. Desde entonces, la fiebre de las Fender reverberadas y los trémolos pintureros ha crecido como la espuma. La cantidad de formaciones que siguen a rajatabla el credo playero resulta inabarcable. ¿Lo difícil? Diferenciarse.
Los Tsunamis están emparentados con los Gaforic, The Letizias (Matías Lamb es el saxofonista más solicitado de la zona), Los Creyentes y, cómo no, Los Malignos (los hermanos surferos de Guadalupe Plata). Representantes todos ellos de la fértil escena musical de Úbeda. El primer álbum largo llega tras varios años de crecimiento en directo, curtiéndose en ciclos mensuales como el “Great Googa Mooga!” de Granada. A estas alturas, Los Tsunamis ofrecen un sonido poderoso y crujiente. Más próximos a la costa estadounidense (la constante de los saxos calenturientos) que a las formas hispanas de Los Coronas. De momento, Los Tsunamis rechazan la trompeta.
La vena “instro” tiene algo palpitante: la mejor banda sonora para imágenes agitadas. Por eso, las diez canciones que componen “Amigo neutrón” se devoran con gusto y rapidez. El título del disco apela al space-surf de las series de ciencia ficción mediante hipnóticos juegos de theremin. Uno de los múltiples palos que tocan Los Tsunamis, pues también lo intentan con el western (‘La leyenda del hombre sin nombre’) y el clásico rocanrolito swingueante de piel desgastada (‘Me pica el boogie’). Variedad, frescura y solvencia. Buen arranque.
