«Una especie de jam de free electrónica con sintetizadores y chicas manejando guitarras tratadas hasta la dislocación»
Carter Tutti Void
“Transverse”
MUTE/PIAS
Texto: DARÍO VICO.
La pareja formada por Nick Carter y Cosey Fanni Tutti formaron el núcleo electrónico de Throbbing Gristle, y ella fue una de sus activistas más divertidas, una especie de Linda Lovelace –recordar la faceta contracultural de la estrella porno– de la música industrial. Una vez disuelta la banda, los dos proyectos paralelos enfrentados fueron los aci-délicos Psychic TV, con Genesis P. Orridge al frente, que a mediados de los 80 dejaron unos cuantos hits bastante extraños, como ‘Godstar’ y ‘Roman P’, y Chris & Cosey, dúo bastante disciplinado dentro de lo que cabe devoto de la electrónica experimental, que practicaban una especie de industrial-ambiental precursor de muchas cosas. Hace relativamente poco, por cierto, se reeditaron en cedé y vinilo, al tiempo que revivían TG, sus primeros discos, que recomiendo fervientemente.
Bien, pues Carter y Tutti siguen grabando material nuevo y es bastante interesante, por concepción y resultados. A ambos se les ofreció la posibilidad de tocar en directo en uno de los conciertos del ciclo «Short Circuits Presents Mute», el pasado verano en el Rondhouse de Londres, y los insurgentes-responsables del sello británico les propusieron contar con alguna adición para ese proyecto, así que C & C eligieron a Nik Colk-Void, una chica que podría ser su hija –hasta se parece a Tutti– entre otras cosas porque lleva en su genética el gusto por practicar música electrónica primaria, aberrante pero al mismo tiempo disciplinada, como refleja este excelente disco grabado en directo en el evento antes reseñado.
“Transverse” son cuatro largos temas para los que Carter Tutti Void (sin comas que los separen) solo se pusieron de acuerdo en los instrumentos que iban a usar y poco más. Una especie de jam de free electrónica con sintetizadores y chicas manejando guitarras tratadas hasta la dislocación. Pese a lo que pudiera parecer, la violencia sonora extrema solo aparece en muy contadas ocasiones –algo así como sucede en la serie “The walking dead”– y es la pulsión rítmica y la tensión por lo que sucede y lo que puede suceder lo que mantiene el tono de un álbum hipnótico, que no dudo tuvo que ser la hostia para los que asistieran en directo a su desarrollo-grabación, sino que también lo es para quien lo escucha en casa.
Uno de los primeros discos de Chris & Cosey se llamaba muy apropiadamente “Techno primitiv” –el cuarto, en 1985, vaya, lo acabo de mirar en Google– y precisamente esto es lo que me sugiere este directo grabado un cuarto de siglo después. Se traga como una pastilla, va directamente al estómago, y de ahí al cerebro. No es un disco agresivo, aunque desata bastante energía, a veces imperceptiblemente y otras de manera evidente, pero es de esos que agreden al sistema sensorial de una manera activa y rápida. Si la electrónica es algo que te gusta más que como un mero colchón sonoro de fondo, y prefieres un ejercicio de interacción con quien la genera, te recomiendo este disco, y en general toda la obra de sus creadores.
–