“Nosotros no escribimos canciones sobre algo que no sea real para nosotros. No nos gusta que las cosas sean complejas”
Aprovechando la visita a Madrid de Eagles of Death Metal, unas horas antes de que la banda californiana actuase en el Dcode David Pérez charló con su vocalista, Jess Hughes.
Texto y fotos: DAVID PÉREZ.
Aprieta el calor en Madrid, el reloj marca poco más de las tres de la tarde y ya llevamos unos cuantos conciertos en el cuerpo. El campus de la Complutense comienza a coger color y le pedimos una pequeña tregua al Dcode, último festival para intentar convencer al verano de que deshaga las maletas. Tenemos una cita de quince minutos con los californianos Eagles Of Death Metal, que por fin tocan en nuestro país (anoche en la sala Apolo de Barcelona y hoy en el escenario principal, Dcode 1 a las 19:10). Tras los terribles atentados que sufrieron en la sala Bataclan el pasado noviembre y la posterior suspensión de la gira europea, vuelven agradecidos por todo el apoyo recibido y con mucho rock and roll que regalar.
Ya nos han dicho que no quieren hablar de nada que tenga que ver ni con terrorismo ni con política. Es lógico y es la idea que llevábamos, centrarnos en la pasión de su música y la fuerza que tiene para unirnos. Nos espera la banda al completo (a excepción de Josh Homme, que suele acompañarlos sólo en ocasiones puntuales), se les ve relajados, contentos y casi sin resaca. Jesús Rubio García, en primera línea, nos echa una mano con el inglés y Jesse Hughes, vocalista, líder y showman total le da la réplica.
Por fin de gira de nuevo… ¿Qué tal?
¡Genial! Teníamos unas ganas locas de tocar… Como cuando ves a esa tía inalcanzable y termináis follando. Así de bien nos sentimos. Y claro, queremos seguir follando, ¡a eso hemos venido! (Risas) Está siendo una de las giras más cachondas y calenturientas de las que hemos hecho
No suena nada mal…
Tenemos un trabajo maravilloso en el que lo único que tenemos que hacer es música y tener sexo todo el tiempo, sí, es algo realmente duro y horrible
En la letra de ‘Complexity’ dejáis el mensaje bien claro: “Hacer las cosas fáciles y no complicarse la vida”. ¿Podríamos decir que esa es parte de vuestra filosofía vital y la aplicáis a vuestra música?
Sí, así es, así es como vivimos. Nosotros no escribimos canciones sobre algo que no sea real para nosotros. No nos gusta que las cosas sean complejas. No tiene que ser duro, solo una cosa tiene que estar dura.
La ironía y el humor en letras desenfadadas son un sello propio de la banda, ¿Cómo es el proceso creativo y composición de las canciones?
El humor es la clave para la música y todo lo demás. Nosotros lo compartimos todo. Yo escribo la base principal de las canciones y luego todos los demás del grupo las convierten en diamantes. (Todos asienten y Dave Catching, con aire de superhéroe dice: “Creadores de diamantes, eso somos”. Todos se ríen)
¿Qué músicos dirías que más te han influenciado?
Muchos… Little Richard, los Stones, Bowie, Britney Spears…Mi lema es “hacer que Little Richard se sienta orgulloso”.
Soléis tocar en directo un par de versiones, el ‘Moonage daydream’ de Bowie y ‘Save a prayer’ de Duran Duran ¿Qué tienen para que las hayáis elegido?
Duran Duran son una de las mejores bandas del mundo, pura rock and roll actitud. Hacían un éxito detrás de otro y nunca perdían su integridad. Y Bowie es Bowie. Sin él posiblemente no existiría EODM
¿Conocéis la música española?
Bueno, hay un grupo español que nos llama la atención… (como por arte de magia, nos enseña dos vinilos de Los Vinagres). Son realmente buenos, muy interesantes, los recomiendo, son maravillosos
Fundaste la banda junto a Josh Homme a finales de los 90, ¿Qué recuerdas de aquellos primeros años?
Recuerdo cada segundo de aquellos años. Somos muy afortunados. Josh es el que lo empezó todo. Y lo curioso es que, de hecho, los Eagles empezaron antes que Queens…
¿Y Josh, os veremos pronto a los dos compartiendo escenario?
Sí, claro, siempre y cuando Queens me dejen hacer un tour y subirme al escenario con ellos (ríe).
¿Nos puedes adelantar algo sobre proyectos futuros que tengas en mente?
Tan pronto como lleguemos a casa nos volveremos a meter en el estudio. Lo próximo se va a llamar, seguramente, “Coitus interruptus”. Ya lo tenemos todo preparado.
¿Qué le dirías a vuestros fans españoles?
La pasada noche en Barcelona fue especial, me emociono mucho con mis fans, especialmente ahora. No podríamos estar aquí sin ellos. Y les amo, amo su entusiasmo. Cuando estaba cansado, salía de la furgoneta y veía a gente tan maravillosa… Este es el mejor trabajo del mundo, tenemos mucha suerte. Los peores días para nosotros son mejores que los mejores días en cualquier otra vida. Y la única razón por la que tenemos este trabajo y somos tan afortunados es porque la gente quiere vernos. Nuestros fans son las personas más importantes de nuestras vidas.