“Compacto y trabajado, este “Tren fantasma” se me antoja el mejor álbum en conjunto de la banda”
La Gran Esperanza Blanca
“Tren fantasma”
INFINITO DISCOS
Texto: EDUARDO IZQUIERDO.
Perdonen, pero aquellos que aún no se han acercado a La Gran Esperanza Blanca no saben lo que se pierden. En 2013 regresaban tras un montón de tiempo desaparecidos con “Derrota”, disco que, confieso, no acabó de engancharme al cien por cien. Todo lo contrario de lo que sucede con este “Tren fantasma”, que parece confirmar que Cisco Fran y los suyos han vuelto para quedarse. Lo hacen recuperando además su formación original, que completan Chiti Chitez al bajo, Chuso Al a la batería y Spagnolo Ferocce a la eléctrica, dejando para Cisco las acústicas, la armónica y, por supuesto, la voz.
Rompe el hielo ‘Aquí estoy (en vía muerta)’, tema de rock norteamericano tradicional que apunta a hit. ‘Tu risa’ arranca con la típica armónica dylaniana, marca de fábrica de la banda, para transformarse en un country resultón que recuerda a Johnny Cash. ‘Estrella de mar’, en cambio, opta por la psicodelia y la confusión sonora para la letra más lisérgica del álbum. ‘La última copa’ tiene un deje a La Guardia por su cercanía al pop, mientras que ‘Payaso’, el tema largo del disco, opta por poner toda la carne en el asador en su letra. Con ‘Azúcar y miel’ regresan las guitarras eléctricas apostando por el modelo de canción en que la guitarra responde a la voz prescindiendo prácticamente de estribillo hasta que este nos pilla desprevenidos. ‘Los años de felicidad’, en cambio, inciden en la importancia de la steel guitar y la grandeza de la cotidianidad: “Hoy recuerdo los veranos, cogidos de la mano, escuchando a Nino Bravo en el paseo frente al mar”. Solo es una pausa para que las eléctricas vuelvan con ‘Música antigua’, con el Dylan de Highway 61 Revisited más presente que nunca. La banda nos sorprende con el arranque de violín de ‘El chico del tren’, quizá lo mejor del lote, espléndida western-song con un excelente trabajo de May Ibáñez en la segunda voz. ‘Mar del coral’ sigue la línea y muestra que cuando la banda está más segura es cuando afronta ese country-rock trotón que los hace diferentes. ‘Tren fantasma’ arranca lo-fi para seguir la línea, creando la sensación de que el disco acaba por todo lo alto. Y lo hace oficialmente con, la de nuevo dylanita ‘Cantad conmigo’. Y añado el adverbio porque hay una última sorpresa que opto por dejar para los compradores del disco.
Compacto y trabajado, este “Tren fantasma” se me antoja el mejor álbum en conjunto de la banda, por encima de los lejanísimos “Harry Dean” o “Medicine show”, llenos de buenas intenciones pero excesivamente irregulares. Solo queda esperar una consistente gira de presentación para ver como suenan esas canciones en directo.
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