«Aquí hay mucho blues, mucho soul y mucho rock. Todo perfectamente mezclado para dar un resultado consistente y muy adictivo»
Vintage Trouble
«The Swing House acoustic sessions»
BLUE NOTE RECORDS
Texto: EDUARDO IZQUIERDO.
En 2011 aparecía casi sin previo aviso el primer y hasta ahora único larga duración de una banda con sede en Hollywood (California) que respondía al nombre de Vintage Trouble. Con tan solo un año de existencia, el grupo ponía en circulación «The bomb shelter sessions», junto a una nota de prensa en la que se hablaban de influencias de los Stones, los Animals o el rock and roll de Chuck Berry y Little Richard. Con tan solo darle una escucha al disco, sin embargo, se hacía imposible no situarlos en el mismo pelotón que a bandas como The Bellrays o The Dirtbombs en las que una base rock se combinaban, casi de manera perfecta, con desarrollos y melodías soul.
Tres músicos blancos, Nalle Colt, Rick Barrio Dill y Richard Danielson, se encargaban de dotar al combo de una rotunda base rítmica para poner el proyecto en manos del carisma y la capacidad vocal de Ty Taylor, un auténtico animal escénico, una fuerza de la naturaleza que supuraba su sangre negra por los cuatro costados y que dotaba a la banda de ese aroma a soul clásico. Su espectacular puesta en escena hizo, además, que gente como The Who o los mismísimos Rolling Stones se fijaran en ellos para encargarse de telonear alguna de sus giras.
Mientras giran por nuestro país, llega a mis manos su nuevo trabajo, un epé de cinco canciones que edita nada menos que Blue Note Records. Su escucha lo convierte, en mi opinión, en su mejor trabajo hasta la fecha, y ahí va el por qué. «The bomb shelter sessions» era un buen disco, sin duda. Notable, diría, pero perdía fuelle tras las escuchas, sobre todo en su segunda parte. La sorpresa y el ímpetu inicial se tornaban en ligera monotonía en sus últimas canciones y eso le restaba empaque. Quizá por falta de espacio o porque la banda se muestra tremendamente compenetrada tras tres años de giras permanentes, eso no pasa con «The Swing House acoustic sessions». Integrado por dos revisiones de su debut como ‘Run outta you’ y ‘Blues hand me down’, que mejoran las versiones ya conocidas, y tres temas nuevos, ‘Lo and behold’, ‘Another man’s world’ y ‘Never mine’. El resultado es una delicia de principio a fin. El grupo suena mejor que nunca y muestra que saben dar un paso más allá a su ruidosa propuesta habitual para jugar también con intensidades y detalles de producción. Aquí hay mucho blues, mucho soul y mucho rock. Todo perfectamente mezclado para dar un resultado consistente y muy adictivo. Esperemos que en su actual gira les dé por hacer una parte del set en este formato. Sería un regalo de Dios.
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