“Funciona casi como uno de sus conciertos: repertorio elástico, por variado, pero que va al hueso, pues condensa temas esenciales de su amplio cancionero”
Ariel Rot
“Lo mejor de Ariel Rot”
WARNER
Texto: JUAN PUCHADES.
En los últimos tiempos, Ariel Rot ha comenzado a trabajar con regularidad en el mercado colombiano, donde se valora su música y se le ha recibido como la rotunda leyenda del rock en nuestro idioma que es. Ahora, y exclusivamente para Colombia, se edita este “Lo mejor” que pretende consolidar su presencia en el país suramericano.
Un álbum que recoge quince temas de Rot seleccionados de su discografía en solitario (incluyendo tomas del lejano directo “En vivo, mucho mejor”. ¡¿Para cuándo un nuevo “live”?!) y que funciona casi como uno de sus conciertos: repertorio elástico, por variado, pero que va al hueso, pues condensa temas esenciales de su amplio cancionero. Una selección que permite comprobar su excelencia como compositor e intérprete, también de qué modo desde el rock se interesa por otros géneros con los que aporta color y sabor a su guiso musical.
Se abre con la efervescente y contagiosa ‘Baile de ilusiones’ y se cierra con la gigantesca y reflexiva ‘Para escribir otro final’. Por en medio, ‘Papi dame la mano’ (tema durísimo que, musicalmente, quizá en Colombia se comprenda mejor que en España), ‘Colgado de la luna’, ‘Dos de corazones’, ‘Hoja de ruta’, ‘Geishas en Madrid’, ‘Milonga del marinero y el capitán’, ‘Mucho mejor’, ‘Vicios caros’ y ‘Debajo del puente’ (en la nueva versión grabada el año pasado). Además, por aquello del inevitable gancho comercial, se incluyen cuatro de los duetos del álbum “Dúos, tríos y otras perversiones”: ‘Felicidad’ (con Fito Páez), ‘Me estás atrapando otra vez’ (con M Clan), ‘Adiós carnaval’ (con Bunbury) y ‘Cenizas en el aire’ (con su antiguo socio Andrés Calamaro).
Un repertorio de muchos quilates el de este “Lo mejor”, absolutamente contundente y apabullante que, en lo personal, viene a confirmarme esa idea que llevo repitiendo desde hace un tiempo (sin que a nadie parezca importarle demasiado) de que Ariel está grabando los mejores discos del rock español de los últimos años, sumada a que es uno de los mejores compositores rock de nuestro país, o de nuestra lengua, que a él lo de las fronteras (musicales y mentales) le quedan estrechas.
Un álbum perfecto rematado con un diseño de portada (de Rojo Pistacho) más acertado que el de sus últimos álbumes de estudio, y con un libreto interior funcional que permite saber de un vistazo de qué álbum ha sido extraído cada tema. Debería distribuirse en España, quizá sirviera para arrojar nueva luz sobre estas canciones, sobre la obra inmarcesible de Ariel Rot.
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Anterior crítica de discos: “At least for now”, de Benjamin Clementine