Discos: “¡Chicas! Spanish female singers volumen 2 (1963-1978)”

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“Cumple a la perfección su cometido de rescatar del olvido artistas que en su día no consiguieron el éxito que buscaban o fueron olvidadas rápidamente por el gran público”

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Varios
Chicas! Spanish female singers volumen 2 (1963-1978)”
VAMPISOUL

 

 

Texto: ÀLEX ORÓ.

 



“Os vas a enterar de lo que vale un peine, malandrines (as)”, parecen que nos digan el trío Las Chic desde la portada del segundo volumen de ¡Chicas!, los recopilatorios que Vampisoul dedica a las cantantes femeninas españolas de los sesenta y los setenta. Y Las Chic aciertan, porque los veintiocho temas seleccionados por Vicente Fabuel son otro paradigmático ejemplo de las desconocidas maravillas que atesora el pop hispano y que, poco a poco, el sello que dirige Iñigo Munster ha desenterrado en series compilatorias como “Sensacional soul”, “Algo salvaje”, “Skanish sound” o “Pippermint Twist”. En esta ocasión, encontramos canciones que cumplen a la perfección los cánones del pop femenino de los sesenta como ‘Snob ye-yé’, de Marina, ‘No soy un guarismo’, de Alicia Granados, o ‘Tú no eres ye-yé’, de Blanca Aurora, y otras que van más allá del estereotipo de la “la chica ye-ye” que inmortalizó Concha Velasco. La pericia del compilador Fabuel le lleva a escoger canciones como las ya citadas con una letra cargada de picardía y que no ha envejecido tanto como nos podríamos imaginar. Alusiones a los pijos que juegan al golf, a la incomprensión generacional a la hora de escoger vestimentas… Han pasado cincuenta años, pero a veces parece que las cosas no han cambiado tanto.

Entre las del segundo grupo podemos citar como ejemplos la arrolladora versión en francés y en clave ska de ‘My boy Lollipop’ que interpreta la norteamericana Donna Hightower, o el tremendo stomper bailable de Bárbara Potts, otra cantante procedente de los Estados Unidos y que forma parte de esa legión de artistas extranjeros que se afincaron en España durante los sesenta y entre las que también está la francesa Claudine Coppin, de la que se ha incluido la canción ‘40 grados a la sombra’, de la banda sonora de la película del mismo título y en la que canta acompañada por Los Indonesios, otra de las bandas foráneas que grabaron discos en España durante esa época.

Entre el material más sorprendente podemos citar el furioso funk de Sola interpretando ‘Tabú, tabú’, una composición de Manuel Alejandro y entre las curiosidades que nos revela este segundo volumen de “¡Chicas!” nos enfrentamos a una infantiloide versión del ‘Pop corn’ de Gerson Kingsley a cargo de Las Trillizas de Oro (si lo han leído bien, Las Trillizas de Oro, las que años después se convirtieron en el coro de acompañamiento de Julio Iglesias). Entre las féminas más raciales de esta compilación están Morena y Clara, un dúo creado con el objetivo (fallido) de rivalizar con Las Grecas y que aportan el tema ‘Ya no te guardo rencor’, que no tuvo ninguna repercusión en 1978, año en el que fue incluido en su tercer LP. “¡Chicas!” es un disco que cumple a la perfección su cometido de rescatar del olvido artistas que en su día no consiguieron el éxito que buscaban o fueron olvidadas rápidamente por el gran público. Con discos como éste, España da pequeños y tímidos pasos de reconocer como merece su legado musical, algo que se vive con completa normalidad en países como Francia, Italia o Gran Bretaña.

Anterior crítica de discos: “Modernista”, de Brighton 64

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