Nino Bravo, Massiel, Rocío Jurado o Fórmula V hicieron populares algunas de las mejores canciones de Pablo Herrero y José Luis Armenteros, un imbatible dúo compositivo cuya obra pone en valor César Campoy con esta selección musical.
Selección y texto: CÉSAR CAMPOY.
Piezas clave en la música popular hispana del siglo XX, entre las décadas de los sesenta y los ochenta Pablo Herrero y José Luis Armenteros dieron vida a decenas y decenas de composiciones que forman parte de la banda sonora de varias generaciones. Pablo Herrero, con el cual charlamos largo y tendido en el Cuadernos Efe Eme número 28, trabajó con los más grandes y, a base de mucho esfuerzo y modestia, tocó el cielo a partir de himnos eternos junto a su inseparable colega. Esta es, tan solo, una pequeñísima muestra de algunos de ellos.
1. “Nit de llampecs” (1965), de Los Relámpagos
Con Zafiro-Novola, Los Relámpagos dieron forma a una de las mejores épocas de su dilatada trayectoria. Con ellos, Pablo y José Luis comenzaron a mostrar su maestría a la hora de crear grandes obras. Esta es una de las primeras joyas compositivas. Muestra ineludible del célebre Spanish sound, es un verdadero monumento de nuestra música moderna instrumental. Pop, herencia popular e innegable elegancia
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2. “Deja la flor” (1968), de Massiel
Durante varios años, Armenteros y Herrero trabajaron, codo con codo, con una Massiel en estado de gracia. De una fuerza abrumadora, “Deja la flor” se incluyó en la banda sonora del filme Cantando a la vida (Angelino Fons). La letra parte del texto de José Agustín Goytisolo.
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3. “Tierras lejanas” (1971), de Basilio
El cantante panameño fue uno de los primeros artistas que Herrero acogió en su seno, durante su estancia en Zafiro-Novola. Produjo buena parte de su primera etapa y, junto a Armenteros, ideó este trallazo soulero que encabezó todas las listas de éxito de aquel año.
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4. “Libre” (1972), de Nino Bravo
Muchos fueron los compositores que brindaron su arte al eterno Nino Bravo. Eso sí, pocos supieron captar, de manera tan intensa, sus tremendas posibilidades interpretativas y emotivas. En casi todos los temas que el dúo proporcionó al de Aielo de Malferit estuvo presente el concepto de libertad. Imposible no admirar la tremenda entidad de “América, América”, “Un beso y una flor”, “Nuestro hogar será el mundo” y, por supuesto, “Libre”.
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5. “Eva María” (1973), de Fórmula V
José Luis y Pablo sirvieron en bandeja, a Fórmula V, más de la mitad de sus canciones más populares. Para ellos compusieron tanto piezas arriesgadas como criaturas destinadas a convertirse en canción del verano. En este “Eva María”, Herrero introdujo novedosos efectos e incorporó uno de los primeros Moog que entraron en España.
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6. “La estrella de David” (1973), de Juan Bau
Nuestro dúo compositivo supo idear creaciones, como pocos, para ser interpretadas por el clásico y arrebatador registro de origen mediterráneo. En la voz de Juan Bau, Herrero encontró otra mina a explotar. Él y Armenteros cincelaron una pieza que arrasó en todo el mercado latino.
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7. “Libertad sin ira” (1976), de Jarcha
En pleno inicio de la democracia, la pareja recibe el encargo de poner banda sonora a un texto del publicista Rafael Baladés, destinado a musicar la campaña de lanzamiento de Diario 16. El resultado final acabó convirtiéndose en el himno de la transición, y un canto a la esperanza.
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8. “Me vas a echar de menos” (1980), de José Luis Rodríguez, El Puma
La primera colaboración con El Puma no pudo ser más exitosa. Además de dar, junto al maestro Leiva, un nuevo aire explosivo al tradicional “Pavo real”, Armenteros y Herrero crearon para el venezolano éxitos mundiales como este que nos ocupa.
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9. “Como una ola” (1981), de Rocío Jurado
En 1981 RCA tiró la casa por la ventana y contrató a los mejores compositores y arreglistas del momento para construir el elepé que lanzó al estrellato internacional a Rocío Jurado. Herrero y Armenteros contribuyeron, entre otras cosas, con el que es, probablemente, el tema más conocido de la artista andaluza.
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10. “Latino” (1981), de Francisco
La puesta de largo del cantante valenciano fue todo un acierto. Pablo y José Luis centraron sus esfuerzos en componer y producir todos los temas de su primer larga duración. ¿El resultado? Un bombazo en las listas hispanoamericanas, y el primer premio en el Festival de la OTI.
