En solo una década, La Maravillosa Orquesta Del Alcohol han publicado cuatro discos de estudio y dos directos que los han consagrado como una de las bandas más talentosas de nuestra escena. Detrás del acrónimo y las camisetas blancas están David Ruiz (voz y guitarra), Nacho Mur (guitarra), Alvar de Pablo (saxofón, clarinete y coros), Caleb Melguizo (batería y percusiones), Joselito Maravillas «El reverendo del blues» (acordeón y coros), Jorge Juan Mariscal (bajo) y Jacobo Naya (teclados, percusiones, banjo y guitarra). Una revolución que aúna folk, punk, country y rock and roll con una personalidad arrolladora. Javier Escorzo escoge diez canciones que condensan el porqué de su consagración.
Selección y texto: JAVIER ESCORZO.
La Maravillosa Orquesta del Alcohol publicó en 2020 su último álbum, Ninguna ola (PRMVR), y acaban de cumplir su décimo aniversario como banda. Diez años de canciones y carretera, diez años apasionantes e intensos de, como dicen en una de sus últimas canciones, «enseñarle al sol cómo se toma una curva, cómo se parte un amor». Aprovechando la onomástica, repasamos su carrera y recuperamos diez de sus canciones.
1. “Nómadas” (Quién nos va a salvar, PRMVR, 2013)
Aunque había publicado algún epé con anterioridad, fue en 2013 cuando La Maravillosa Orquesta del Alcohol publicó su primer disco de larga duración. Lo grabaron en Estudios Gárate a las órdenes de Kaki Arkarazo y balo la producción de Diego Galaz, el conocido violinista con quien compartían ciudad de origen: Burgos. Quién nos va a salvar situó a la banda en el mapa musical nacional y sus canciones fueron ganando adeptos a sorprendente velocidad. Una de ellas era “Nómadas”: como suele decirse, una auténtica declaración de intenciones con referencias al mítico libro El camino, de Jack Kerouak.
2. “Los hijos de Johnny Cash” (Quién nos va a salvar, PRMVR, 2013)
Aunque en su música confluyen estilos de lo más diversos, uno de sus grandes referentes es Johnny Cash, como puede comprobarse si uno observa el tatuaje que con su cara adorna el brazo de David Ruiz, cantante del grupo, o si escucha otra de las canciones más recordadas de su debut, que se titulaba, precisamente, “Los hijos de Johnny Cash”; en su letra apelaban a la honradez del legendario cantante estadounidense.
3. “Historia triste” (versión de Eskorbuto)
Decíamos que las influencias de La Maravillosa Orquesta del Alcohol son amplísimas, y abarcan el folk, el rock, el blues, el pop, el country, el western… y también el punk. En numerosas ocasiones se han declarado fans irredentos del grupo vizcaíno Eskorbuto; de hecho, en 2014 grabaron una versión de “Historia triste”.
4. “Miles Davis” (La primavera del invierno, PRMVR, 2015)
Satisfechos como estaban con los resultados obtenidos con su primer elepé, para su segundo largo decidieron repetir equipo: nuevamente Estudios Gárate, nuevamente Kaki Arkarazo y nuevamente Diego Galaz. Y, nuevamente también, un puñado de canciones directas e imponentes en las que transmitían al oyente su irrefrenable pasión por la vida. Ya lo dejaban claro en la letra de Miles Davis: «Quiero quedarme a vivir en ese instante en el que la montaña rusa llega arriba y no antes ni después».
5. “PRMVR” (La primavera del invierno, PRMVR, 2015)
Conforme iban teniendo oportunidades, los chicos de La Maravillosa Orquesta del Alcohol aprovechaban para colaborar con algunos de los artistas a los que siempre habían admirado. Si en su primer álbum habían contado con Quique González (“La cuerda floja”), para su segundo trabajo llamaron a Gorka Urbizu, de Berri Txarrak, para que cantase con ellos en PRMVR.
6. “La inmensidad” (Salvavida (de las balas perdidas), PRMVR, 2017)
Suele decirse que el tercer disco es el de la confirmación. Para La Maravillosa Orquesta Del Alcohol fue el de seguir ascendiendo en su fulgurante carrera. No abandonaron su sello, pero añadieron nuevas tonalidades de música balcánica, francesa o castellana. Para ello, utilizaron instrumentos que nunca antes habían empleado, caso del clarinete o el pandero cuadrado, como hicieron en el que fue primer adelanto del álbum, “La inmensidad”.
7. “Héroes del sábado” (Salvavida (de las balas perdidas), PRMVR, 2017)
Es difícil conocer las razones por las que un grupo se convierte en referencia generacional. En el caso de La Maravillosa Orquesta del Alcohol, es muy probable que gran parte de su secreto resida en sus letras, comunes y sinceras, siempre a pie de calle, lo que hace que sean muchos los que se ven reflejados en ellas. Buen ejemplo de ello puede ser “Héroes del sábado”, que parece tratar de ese desencanto que impregna la vida cuando esta se vuelve adulta.
8. “Altamira” (7:47 (ni un minuto más), PRMVR, 2018)
A pesar de tener un estilo muy marcado, en parte debido a los instrumentos que utilizan y a su propia formación, algo que honra a La Maravillosa Orquesta del Alcohol es su afán por evolucionar y explorar nuevos caminos. En 2018 viajaron a Chicago para grabar un epé en los estudios del productor Steve Albini (que tiene en sus curriculum discos de Nirvana, Pixies, PJ Harvey, Mogway…). El resultado fue un sonido descarnado, como quedaba claro en “Altamira”.
9. “Conduciendo y llorando” (Ninguna ola, PRMVR, 2020)
Fueron precisamente sus ansias de no quedarse estancados las que les llevaron a trabajar con Raül Refree, un productor con el que, en principio, nada hacía pensar que fuesen a congeniar; en realidad, el primer paso lo había dado ya David Ruiz (guitarrista y cantante de La M.O.D.A.), que había contado con Refree para su primer escarceo en solitario, el sorprendente nostalgia.en.los.autobuses). Los cambios musicales eran evidentes. Canciones como “Conduciendo y llorando” mostraban su lado más experimental.
10. “Barcos hundiéndose” (Ninguna ola, PRMVR, 2020)
Al margen del riesgo que han asumido en su último álbum, siempre plausible y encomiable, el gran mérito que se podían apuntar los chicos de La Maravillosa Orquesta del Alcohol y su productor Raül Refree es que la banda sonaba distinta sin dejar de sonar a sí misma. Ahí estaba la experimentación, sí, pero también la épica y la emoción de siempre. Algunos cortes, como “Barcos hundiéndose”, recogían a la perfección esas dos facetas de su personalidad como grupo.
Bonus track: “1932” (&, PRMVR / Warner, 2019)
La Maravillosa Orquesta del Alcohol es un grupo que, ya se ha dicho, vive en la carretera. Es sobre el escenario donde desarrollan su verdadero potencial. Si alguien quiere tener un conocimiento completo de la banda, tiene que verlos en directo ineludiblemente para sentir toda la fuerza y honestidad de unos tipos vestidos con pantalones vaqueros y camisetas blancas sin mangas. En 2019 publicaron su segundo disco en directo, titulado &, grabado en un abarrotado WiZink Zenter y rodeados de amigos como Nina (Morgan), Caboverde o Quique González, con quien ya habían colaborado en su primer álbum.
