El próximo viernes, 14 de octubre, y durante tres días más (15, 28 y 29), Los Enemigos vuelven a subirse a las tablas para rescatar en directo algunos de sus álbumes más emblemáticos. Un ciclo de conciertos únicos, bautizado como Universarios, que nos permitirán volver a disfrutar de la banda madrileña y de su legado en canciones. De algunas imprescindibles nos habla Fernando Ballesteros en esta lista.
Selección y texto: FERNANDO BALLESTEROS.
Han pasado treinta y seis años desde que Los Enemigos lanzaron su primer disco. Hoy, en tiempos de descargas y plataformas, apetece recordar una vez más que aquellos días, por mil pelas, en el Bar Velarde te llevabas el elepé, te bebías una birra y te comías una buena tapa.
Los de Josele Santiago crecieron y el vocalista, excepcional letrista, evolucionó desde el ocurrente juego de palabras hasta ser uno de esos autores capaces de conmover con unas cuantas líneas de su puño y letra. Estuvieron en activo diecisiete años del tirón y volvieron en 2014 con una propuesta que hoy está más vigente que nunca.
Es el momento de rescatar algunas de esas canciones que no suelen faltar en sus conciertos. Aquí van diez.
1.- “John Wayne”, de Un tío cabal (1988)
Las cosas claras: los dos primeros discos de Los Enemigos, siendo ya prometedores, estaban muy lejos de lo que terminaría llegando. Pero avisaban grandeza y contenían temas, como este, que son grandes clásicos en su cancionero, con las guitarras marcando la pauta de un disparo rockero que da en toda la diana.
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2.- “Septiembre”, de La vida mata (1990)
La vida mata fue una obra excelsa, lo mejor, de largo, que habían grabado. El disco era incontestable en su conjunto e incluía un ramillete de canciones que se convirtieron en imprescindibles de su repertorio hasta hoy. “Septiembre” es una de ellas. La inspiración le llegó a Josele desde la prensa, cuando leyó una noticia sobre el suicidio de un chaval gallego.
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3.- “Desde el jergón”, de La vida mata (1990)
Sería muy difícil elegir una sola canción de una obra maestra como esta, pero, llegado el caso, “Desde el jergón” tendría muchas papeletas. Impresionante crónica de desesperación penitenciaria, la canción nos ofrece a golpe de riff una visión carente de romanticismo de la eterna figura del perdedor. Solo rabia, mucha rabia.
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4.- “La cuenta atrás”, de La cuenta atrás (1991)
Mensaje directo a esa persona que está en el momento crucial de dar el gran salto al mundo adulto, con todo lo que ello conlleva. Uno de los textos más brillantes de Josele, y eso es mucho decir. La canción es magnífica y la letra inolvidable, avisando al nuevo adulto de lo que se le viene encima, con esa máxima neoliberal de que hay que ganar cueste lo que cueste y caiga quien caiga.
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5.- «¿Por qué yo?», de Tras el último no va nadie (1994)
Es verdad que Josele no guarda buen recuerdo de estos días y que su estado se encontraba muy lejos de ser óptimo; pero, pese a todo, el talento aún le daba para escribir temazos y este es uno de mis preferidos. La canción, con sus ataques a la figura de Juan Carlos I incluidos, es perfecta, y el vídeo, con Josele señalando el cuadro del ahora monarca emérito, fue condenado al silencio. Una pena.
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6.- “Señora”, de Serrat eres único (1995)
Aparte de sus elepés, Los Enemigos han participado en distintas recopilaciones y bandas sonoras. Entre ellas brilla con luz propia su versión de “Señora”, de Serrat, que se convirtió, con toda justicia, en una de esas canciones que no pueden faltar en sus conciertos. El grupo le da una nueva vida rockera a una composición ya de por sí maravillosa y la transforma en una tonada enemiga más.
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7.- “Dentro”, de Gas (1996)
Las guitarras más fuertes de su carrera y las letras más ácidas se encuentran en este disco. Un torrente de energía, con Josele más punk que nunca. Los madrileños no habían sonado nunca tan feroces y esta canción es la mejor muestra de lo que nos encontrábamos en el álbum. Pura furia.
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8.- “Me sobra carnaval”, de Nada (1999)
Guitarras extraordinarias y una letra de las que te impactan desde la primera escucha. Un imprescindible de sus setlist, incluido en un disco marcado por la pérdida de amigos y compañeros que supuso la incorporación al grupo de Manolo Benítez, quien ya formaba parte de sus directos.
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9.- “Siete mil canciones”, de Bestieza (2020)
Tras su vuelta con Vida inteligente, fue una bendita sorpresa que seis años después se descolgaran con un disco que le puede mirar a los ojos a lo mejor de su discografía y que se colocó entre lo más destacado de 2020. Su carta de presentación fue este pelotazo de genuino power pop, una de las más bonitas declaraciones de amor que hemos tenido la suerte de escuchar.
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10.- “Vendaval”, de Bestieza (2020)
Otro de los nuevos tótems enemigos, que consigue mover a cualquiera con su ritmo y derroche de energía. Un número del mejor pop vitaminado que nos muestra a un grupo en plena forma y con una propuesta renovada que, sin abandonar lo clásico, aporta nuevos sabores a su gran receta.
