Un juzgado francés dictaminó ayer (16 de abril) que no ha lugar a la querella contra Bob Dylan por racismo presentada en noviembre por una organización croata. El Consejo Representativo de la Comunidad y de las Instituciones Croatas en Francia acusaba a Dylan de “injurias públicas” e “incitación al odio” por una entrevista publicada en 2012 en la edición francesa de “Rolling Stone”, que era la traducción de una aparecida en la edición estadounidense. En ella, Dylan decía: “Si se tiene al Ku Klux Klan en la sangre, los negros pueden sentirlo, incluso hoy en día. Al igual que los judíos pueden sentir la sangre nazi y los serbios la sangre croata”.
Según el auto, no ha lugar a la querella debido a que Bob Dylan no autorizó a la edición francesa de “Rolling Stone” a traducir y publicar la entrevista. En cambio, se abre un proceso contra Michael Birnbaum, editor de la versión francesa de “Rolling Stone”, por violar las leyes antidiscriminación al reproducir la frase de Dylan. Birnbaum se enfrenta a una pena de hasta un año de cárcel y una multa de 45.000 euros.