«Hacemos psicodelia con retazos de rock cósmico»
Tras múltiples proyectos solistas, entre los últimos Óscar Avendaño y Los Míticos GT’s o Perros Negros, el que fuera bajista de Siniestro Total inicia nueva etapa como Óscar Avendaño y la Banda Fantasma. Por Xavier Valiño.
Texto: XAVIER VALIÑO.
Foto: DENIS CARBALLÁS.
Hace ahora siete años, Óscar Avendaño tenía una canción que creía que necesitaba un sitar. En el estudio de Paco Serén se puso a trabajar en ella con él y, también, con Indy Tumbita. Tanto les gustó el resultado que volvieron a quedar al menos una vez cada año desde entonces. Por el camino se sumaron también Pablo Álvarez y Lucas Fernández.
Con la media docena de canciones que han grabado desde entonces, apareció el pasado 30 de septiembre su debut, Uno, bajo el nombre de Óscar Avendaño y la Banda Fantasma. Tampoco era cuestión de esperar otros seis años para tener un disco de larga duración. Ni siquiera se sabe si habrá más canciones. Al menos por ahora sí tienen claro que no habrá conciertos. Todo esto no los cuenta el propio Óscar.
¿De dónde venís?
Básicamente de la provincia de Pontevedra, aunque de distintos municipios. Bandas anteriores… Tal vez sean demasiadas como para enumerarlas todas, pero resumiendo: Óscar de Siniestro Total, The Bo Derek’s o Reposado. Paco y Pablo de Los Piratas. Indy de Indy Tumbita & The Voodoo Bandits, Los Duques de Monterrey o Heroínas. Lucas de Best Boy.
¿Cómo nace el proyecto?
Indy, Paco y Óscar nos juntamos un día para grabar una canción, por el mero placer de hacerlo. La experiencia nos gustó tanto que decidimos grabar una segunda, y después una tercera. Pablo y Lucas se subieron al carro muy pronto.
Describid vuestro sonido.
Tal vez psicodelia con retazos de rock cósmico. Suena un poco pretencioso, pero no se me ocurre otra cosa.
Principales influencias.
No tenemos principales influencias. Somos devoradores de música y todo lo que escuchamos nos influencia en mayor o menor medida. Si acaso, podríamos decir que en estas sesiones intentamos seguir una línea «un poco hippie».
¿Cómo definiríais vuestro nuevo disco?
Fueron unas sesiones de grabación mágicas, y creemos que eso se refleja en el resultado.
Vuestro disco suena, u os gustaría que sonara, como los de…
Pues no lo sé… lo que más nos dice la gente es que les recuerda a The Beatles y a Pink Floyd. Y no nos vamos a quejar con la comparación.
Cinco discos de cabecera.
En mi caso, te podría citar Rubber soul de The Beatles, Sticky fingers de Rolling Stones, Blonde on blonde de Bob Dylan, Face to face de The Kinks y el primero de Vainica Doble. Pero no son concluyentes: solo son cinco…
Cinco canciones perfectas.
¿Otra vez solo cinco? Pues… “Norwegian wood” de The Beatles, “Thirteen” de Big Star, “Smokestack lightning” de Howling Wolf, “Cold irons bound” de Dylan y “All the young dudes” de Mott the Hopple (o de Bowie). Mañana te diría otras cinco totalmente distintas, seguro.
¿Preferís estudio o directo?
No hacemos directo.
¿A quién os gustaría telonear?
Podríamos plantearnos hacer directo si nos pagasen muchísima pasta, pero puestos a decir locuras diría que a McCartney o a Dylan.
¿En qué disco de homenaje os gustaría participar?
Hay infinidad de bandas que nos gustan. Demasiado jodido escoger solo una.
¿Qué canción del disco es la que mejor os representa y por qué?
Quizá “Los Miserables” sea en la que más sueltos e inspirados estuvimos…
¿Cómo sois encima de un escenario?
Por separado tenemos la suficiente trayectoria como para afirmar que somos solventes. Juntos no lo hemos probado.
¿Qué planes tenéis este año?
Pues a lo mejor grabar otra canción. Solo una, no queremos romper la media.
Tenéis cincuenta palabras para vender vuestro primer disco. ¡Adelante!
Nunca hubo intención de hacer un disco. Solo unas sesiones de grabación de cinco tíos experimentando y divirtiéndose haciéndolo. Una canción al año… ¿Para qué más? El caso es que, cuando llevábamos seis, el resultado nos gustaba tanto que creímos que era nuestro deber dejarlo salir ahí fuera, a vivir su vida.
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