El productor británico David Richards murió el 20 de diciembre, a los 57 años, tras una larga enfermedad. Richards fue el productor de los últimos cuatro discos de Queen (“Kind Of Magic”, “The Miracle”, “Innuendo”, “Made In Heaven”), los álbumes de David Bowie “Never Let Me Down”, “The Buddha Of Suburbia” y “Outside”, y “Blah Blah Blah”, de Iggy Pop, entre otros. Richards comenzó a trabajar en los Chappell Studios, de Londres. Luego se trasladó a Montreux (Suiza), donde fue jefe de ingenieros de los estudios Mountain, que acabarían siendo de su propiedad.
“Será recordado por muchos como un buen amigo. Era divertido y generoso y una gran compañía, un hombre talentoso y capaz, que tenía un instintivo ‘toque mágico’ en el estudio de grabación”, se lee en un comunicado de Queen.