El pasado jueves, Eric Wilson, de “The New York Times”, acudió a la suite de un hotel a entrevistar a Coutney Love. Tras tener que esperarla más de una hora, esta apareció borracha y desnuda. A continuación se puso algo de ropa interior (que según dijo le había costado 4.000 dólares) y un impermeable, con el que luego se paseo por el vestíbulo del hotel con las tetas al aire. Durante la entrevista, reconoció que estaba algo borracha.
Avergonzada por su comportamiento, al día siguiente, se disculpó ante Wilson mediante un mensaje en el que le decía que todo se debía a la combinación del antidepresivo Zoloft y un cóctel.
En su disculpa, Love decía sentirse humillada, ya que “Esa no era yo”. “Confío en que entiendas que nuestro corazón puede llevarnos a todos a los lugares oscuros y enfermos”.