«Duele ver como se le sigue pidiendo que haga el idiota. Y duele ver como él lo hace. Claro, sabe lo que vende y continúa lanzando tópicos a medios generalistas»
Juanjo Ordás disfruta con las palabras de Iggy Pop tanto como con su directo: él siempre sabe lo que tiene que dar. Palabras o culo. Da lo mismo, ahí está Iggy.
Una sección de JUANJO ORDÁS.
La dualidad de Iggy Pop es interesantísima, es un tipo que dependiendo de quien tenga delante vende una faceta u otra a gusto del demandante. Y hace bien, porque así ejerce de bardo de la publicación en cuestión. ¿Quieres saber de qué va tal revista o tal programa? Echa un vistazo a la entrevista que le hayan hecho a Iggy. Y es sorprendente cómo él sabe qué es lo que debe ofertar. Me gustan las entrevistas con Iggy, siempre dice cosas interesantes y su bagaje musical es enorme, la lástima es que habitualmente es desperdiciado por muchos medios. Sinceramente, hoy día, con esa larga carrera a sus espaldas, duele ver como se le sigue pidiendo que haga el idiota. Y duele ver como él lo hace. Claro, sabe lo que vende y continúa lanzando tópicos a medios generalistas que no tienen la menor idea de cómo abordar a ese “buen salvaje” y a los que Iggy deslumbra con un chasquido de dedos. ¡Qué espectáculo!
Dudo mucho que un lector del coto musical español alucine al ver el culo de Iggy una vez más, dudo que se maraville ante su atlético cuerpo de señor mayor. Supongo que al público de Iggy, el que le va a ir a ver a un concierto, el que va a comprar su último disco junto a los Stooges, quiere conocer otros detalles. Y ahí están los periodistas que sí saben qué preguntar, en las mejores publicaciones. Para ellos y sus lectores Iggy sigue regalando declaraciones gloriosas, dinamitando incluso su propia leyenda. Que siga enseñando el culo para los medios generalistas, pero que a nosotros nos lo siga enseñando en el escenario.
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Anterior entrega de Corriente alterna: El festival que podría ser.
