“La realidad se me antoja escurridiza, pero las canciones sí son una forma de fotografiar experiencias, para salvaguardarlas del olvido o de interpretaciones antojadizas, de algún modo. Quiero retratar aquella parte de la realidad que se escapa a la evidencia”
A pesar de su veteranía en otros grupos, el músico sevillano empezó su carrera en solitario el pasado año con el disco “Dadá estuvo aquí”, grabado en los Estudios Sputnik con Jordi Gil. Sobre este disco, y este nuevo camino, habló con Juanjo Ordás, a quien ya sorprendió hace meses, como narró en su sección Corriente alterna.
Texto: JUANJO ORDÁS.
Foto: JAVIER ROSA.
Es autor de “Dadá estuvo aquí”, un primer disco más que interesante editado el año pasado y que ahora vuelve a las tiendas de la mano de Warner con una mayor difusión. Sin duda, Chencho Fernández ha sido una de las mejores sorpresas de este 2015 junto con Soleá Morente y Carmen Boza. Con él comentamos su actualidad presentando “Dadá estuvo aquí”, con una gira bien estructurada que le llevará por un buen puñado de salas.
No eres un debutante, pero podemos decir que después de distintos proyectos, esta es tu gran puesta de largo como solista.
Considero “Dadá estuvo aquí” como la piedra de toque sobre la que se edifica mi carrera en solitario, aunque llevo debutando muchos años.
“Dadá estuvo aquí” se puso a la venta el año pasado de forma independiente y ahora lo reedita Warner. Entiendo que tendrás una perspectiva más clara del disco ahora que cuando se editó.
Sí, así es. El disco ha crecido más allá de nuestros planteamientos iniciales y de alguna forma se ha emancipado y ya tiene una vida propia. Es significativo que haya transcurrido justo un año desde su edición inicial a este de Warner, puesto que se ha evidenciado el potencial que contiene, así como todo el trabajo que hemos realizado todo este tiempo para la difusión del álbum.
También hay algo fantasmal a lo largo del disco. Un misterio plácido, agradable, pero misterio al fin y al cabo.
Debe ser cosa de Dadá. El misterio es algo que se escapa de las manos humanas, ha venido de forma espontánea.
Encuentro en tus canciones la necesidad de capturar escena del mundo que te rodea, un poco en la tradición de Lou Reed. Como si tus canciones pudieran capturarse en una fotografía.
La realidad, supongo que como para cualquiera, se me antoja escurridiza, pero las canciones sí son una forma de fotografiar experiencias, para salvaguardarlas del olvido o de interpretaciones antojadizas, de algún modo. Quiero retratar aquella parte de la realidad que se escapa a la evidencia.
La realidad es algo inabarcable que, para colmo, varía de una persona a otra, pero, ¿cómo es para ti, y que parte quieres capturar en tus canciones?
Mi realidad es poliédrica como la de cualquiera y está en sintonía con mis distintos estados de ánimo. Aún así, supongo que no se parece a la de nadie. Es esa subjetividad la que trato de plasmar en mis canciones. Los temas universales siempre han estado planteados. Yo pretendo matizarlos y exponerlos a mi manera.
Componiendo “Dadá estuvo aquí”, ¿en qué momento te diste cuenta de que tenías entre manos un disco tan estupendo? O tal vez no lo viste así, pero sí te darías cuenta de que tenías un disco que te satisfacía.
No pensaba demasiado en ello al principio, simplemente quería plasmar de forma intuitiva ciertas vivencias personales. Me di cuenta de la envergadura de lo que teníamos entre manos en la forma de tratar esas canciones que tuvo lugar en el estudio. El enfoque que les dio el productor Jordi Gil fue determinante.
El disco tiene sonoridades anglosajonas, pero al igual que otros compañeros de profesión, como Quique González, consigues que trabajen para ti como músico español, en lugar de dejarte dominar. Hay que claro el suelo que pisas para conseguirlo, tener muy clara tu denominación de origen y lo que pasa cuando sales a la calle.
Supongo que tengo bien asimiladas mis influencias y mi ubicación personal y artística. No me considero necesariamente realista pero sí consideró fundamental la coherencia artistica. Mi patria, como ya definieron algunos, también es la lengua castellana.
En lo que a mí respecta, Carmen Boza y tú sois las grandes sorpresas de este año. Dos nombres que preveo van a tener una carrera interesante.
Espero que así sea.
Ahora que tu obra está llegando a más medios de comunicación, me pregunto si uno se centra más. No me refiero a ser más profesional, sino a la hora de tomarse esto como un hermoso trabajo que incluye una parte importante de negocio.
Siento que mi carrera se está encauzando de una forma más afianzada y entronca mi vocación de toda la vida con un aprendizaje del negocio musical y de la industria que necesariamente forma parte de la dedicación profesional a la música.
¿Qué ocurre con las canciones en el escenario frente al público? Me refiero si hay cambios y muestran nuevas facetas.
El repertorio consta de casi todas las canciones de “Dadá estuvo aquí” más algunas aún inéditas. Han volado del nido y cada noche tienen su vida propia, aunque no se olvidan desde donde parten.