Los medios argentinos se llenaron de rumores sobre la salud de Charly García cuando, antes de ayer, el rockero argentino fue visto al entrar en silla de ruedas en el Instituto Fleni de Buenos Aires, la misma clínica donde se encuentra Gustavo Cerati. Unos rumores aseguraban que el músico iba a someterse a un complejo tratamiento por la artrosis que padece. Otros apuntaban a que padecía una grave alergia a causa de los corticoides que estaría tomando para curar una bronquitis. Finalmente, los había que achacaban su presencia en la clínica a una recaída en las drogas.
Fernando Szereszvsky, manger del músico, desmintió los rumores: Charly había acudido al centro médico al sufrir un esguince de rodilla mientras hacía ejercicio.
Muy molesto, el propio Charly García declaró: “Estoy perfecto, fui a hacerme un chequeo de la rodilla y nada más, entré y salí”. Según dijo, los rumores eran fruto del “afán sensacionalista. Hay gente que le gusta joder, no se bancan que una persona haga las cosas bien”. Con su pasado, parece que la prensa tiene ganas de sangre.
