PISTAS
«Me gustaría que en mi funeral hubiese un buen desfile festivo, con su charanga jazzera y sus bailes de second line»
En los breves huecos que le deja la apretada agenda con Leiva, componiendo junto a músicos como Quique González o en proyectos paralelos como Bruna, César Pop aprovecha para volver a su proyecto solista. De momento, prepara el concierto que ofrecerá en Madrid, el 23 de febrero, en la sala Búho Real. Y ya empiezan a asomar nuevas canciones, aunque aún quedan meses para que tome forma su próximo disco. De momento, y para abrir boca, le preguntamos qué anda haciendo estos días cuando no está detrás del teclado.
Texto: CÉSAR POP / EFE EME.
Último libro que has leído.
Ahora mismo estoy con dos a la vez: El ruido eterno, de Alex Ross, en el que el crítico musical norteamericano reflexiona a lo largo de varios artículos sobre música que va desde Mozart o Schubert a Björk y Radiohead. Para compensar la densidad de estos ensayos, los voy intercalando con la autobiografía de Woody Allen, A propósito de nada, que me está gustando mucho también.
Última película que has visto.
Cinco lobitos, de Alauda Ruiz de Azúa.
Última serie de televisión que has visto.
Treme, pero aún voy por el cuarto o el quinto episodio de la primera temporada. Los meses de confinamiento por la pandemia acabaron por completo con mi capacidad para ver series.
Último disco que has comprado o escuchado.
El último de Patricia Lázaro, Gloria pelea. Me encanta. Tengo muchas ganas también de hincarle el diente al nuevo de Joe Henry, All the eye can see.
Último descubrimiento musical.
A raíz de un libro que he leído sobre las brass bands de Nueva Orleans me he tirado unas cuantas semanas escuchando a algunas de ellas, sobre todo la Hot 8 Brass Band y la Rebirth Brass Band. Me encanta la fusión que hacen de jazz tradicional neworleano con funk y hip-hop contemporáneo, y la energía que son capaces de mover con un montón de instrumentos que no necesitan amplificación alguna. Pueden montar un jaleo tremendo en cualquier parte. Eso me fascina.
¿Cuál es el mejor concierto que has visto en tu vida?
No sé si es el mejor, pero uno de los que más me impresionó en los últimos años fue el que Bon Iver dio en el MadCool en el verano de 2019.
¿Qué música escuchas cuando estás de gira?
Muchas cosas que no tienen nada que ver unas con otras. Chavela Vargas, Martirio, RATM, Tom Waits, Serrat, Los Chalchaleros, The Beatles, Van Morrison, Silvio Rodríguez, Sabina, carnavales de Cádiz, Daft Punk, Sheryl Crow, Javier Ruibal, Fito Páez, Compay Segundo…
¿Cuál ha sido tu peor experiencia como músico?
Un fin de semana hace muchos años fui a tocar un repertorio de pasodobles en una sala de fiestas. Y, bueno, la cosa es que no se trataba de tocar, sino de hacer playback. Un horror. Nada me gustaba de aquella situación y, para colmo, en medio de una de las canciones se puso a saltar el minidisc y tuvimos que pasar a la siguiente. No se dio cuenta ni una persona.
¿Practicas algún deporte?
Salgo a correr de vez en cuando.
¿Eres aficionado a algún deporte?
Puedo llegar a entretenerme viendo un partido de tenis, pero en realidad no sigo los deportes ni soy aficionado a ninguno.
Ciudad favorita.
Xixón, sin duda alguna.
Bebida preferida.
El agua.
Comida.
El tiramisú.
Tus mitos musicales.
Joan Manuel Serrat, Tom Waits y Leonard Cohen, entre muchos otros.
Un vicio confesable.
Los yogures griegos con trozos de stracciatella.
Afición desconocida.
Los videojuegos.
Un placer musical culpable.
Mecano, aunque cada vez siento menos culpa por los placeres, y aspiro a eliminarla por completo.
¿Con quién te gustaría compartir estudio o escenario?
Con Drexler.
¿Cuál es el disco que más has escuchado en tu vida?
La cosa anda entre Revolver y Rubber soul, de The Beatles; Mediterráneo, de Serrat, y, curiosamente, August and everything after, de Counting Crows. Siempre vuelvo a esos discos, e intuyo que lo seguiré haciendo hasta los restos.
¿Qué canción te gustaría que sonase en tu funeral?
Mis amigos íntimos saben desde hace bastantes años que me gustaría que pusiesen “La canción de los buenos borrachos”, del disco que hicieron al alimón Joaquín Sabina y Fito Páez, pero a raíz de mis lecturas sobre las brass bands de Nueva Orleans, ahora pienso que lo que más me gustaría sería un buen desfile festivo, con su charanga jazzera y sus bailes de second line, como los que hacen por allí en los funerales.
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